El banco holandés ABN Amro registró un beneficio neto de 478 millones de euros en el primer trimestre, lo que supuso una caída de un 20 % respecto del mismo periodo del año anterior, debido a los costes temporalmente elevados de la gestión de liquidez, indicó la entidad este miércoles en un comunicado.

El resultado operativo decreció entre enero y marzo un 23 % hasta los 754 millones de euros, mientras que los ingresos de la entidad bajaron un 11 % hasta los 2.081 millones.

Los gastos operativos bajaron un 2 % hasta los 1.327 millones.

El banco vio disminuir ligeramente su solvencia en el primer trimestre con respecto al mismo periodo del año anterior, al pasar su ratio de capital de máxima calidad CET 1 del 18,4 % al 18 %.