El gigante francés del lujo Kering pagará 1.250 millones de euros al fisco italiano para arreglar un litigio de la marca Gucci, de la que es propietaria, por fraude fiscal, informó este jueves el grupo.

En un comunicado, Kering explicó que el pacto con la Agencia Tributaria italiana reconoce que Gucci estuvo establecido en Italia durante el periodo 2011-2017, por lo que acepta pagar 897 millones de euros en impuestos adicionales, así como "otros pagos extra por multas e intereses".

La Fiscalía de Milán investigaba a Kering desde 2017 por declarar a través de una filial en Suiza, Luxury Goods International (LGI), las actividades que el grupo tenía en Italia.

Merced a este arreglo, las cuentas de Kering registrarán el desembolso de 600 millones de euros más en pago de impuestos, mientras que el flujo de caja tendrá una salida imprevista de 1.250 millones, según el mismo comunicado.

El pasado mes de febrero, Kering anunció un beneficio de 3.714,9 millones de euros en 2018, un 108,1 % más que el año anterior, impulsado principalmente por las ventas de Gucci.