El banco italiano Intesa Sanpaolo obtuvo un beneficio neto de 1.050 millones de euros en el primer trimestre de 2019, un 16% inferior a los 1.252 millones de euros que registró en el mismo periodo del año anterior, informó hoy la entidad.

Este beneficio neto es superior al esperado, aunque supone una caída en comparación con hace un año, cuando Intesa Sanpaolo se benefició de la plusvalía de 260 millones de euros por la venta de su parte en la compañía ferroviaria Nuovo Transporto Viaggiatori.

Los ingresos operativos netos se situaron en 4.389 millones de euros, un 8,8% menos que los 4.813 millones de hace un año, pero un 4,6% más que los 4.196 millones del último trimestre de 2018.

El beneficio bruto fue de 1.792 millones de euros en el primer trimestre de 2019, frente a los 1.370 millones de los últimos tres meses del pasado año, pero menos que los 1.969 millones del primer trimestre de 2018.

El resultado de la gestión operativa fue de 2.185 millones de euros, un 33,5% más que los 1.637 millones del cuarto trimestre de 2018 y un 12,7% inferior a los 2.504 millones interanuales.

Estos resultados van "plenamente en línea" con los objetivos fijados por la entidad.

El banco sigue con sus planes para reducir su cartera de créditos deteriorados, y ha reducido este tipo de productos en 1.000 millones de euros en el primer trimestre y en 30.000 millones desde septiembre de 2015.

Esta tendencia fue celebrada por el consejero delegado de Intesa Sanpaolo, Carlo Messina, quien apuntó que este "objetivo significativo" ha situado los créditos morosos en el "mínimo histórico", reforzando las cuentas sin coste para los accionistas.