Mérida, 18 mar (EFE)- El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, ha dicho este lunes que su firma "respetará" el calendario firmado con la Empresa Nacional de Residuos Radiactivos para el cierre de la planta nuclear española, en el que su empresa apuesta por extender la operatividad de la central de Almaraz (Cáceres) hasta 2028.

Iberdrola, Endesa y Naturgy, propietarios de la central nuclear de Almaraz, se reúnen de nuevo mañana para intentar llegar a un acuerdo para presentar la solicitud de renovación del permiso de explotación de la planta, para lo que tienen de plazo hasta el 31 de marzo.

A pesar de que todas las empresas con participaciones en instalaciones de generación nuclear en España hayan firmado con la Empresa Nacional de Residuos Radiactivos (Enresa) el protocolo que recoge el calendario por el que todas las nucleares españolas cerrarán entre 2025 y 2035, la última reunión finalizó sin acuerdo.

Preguntado por esta falta de acuerdo, Sánchez Galán, que este lunes ha colocado el primer panel solar de la futura planta fotovoltaiva de Usagre (Badajoz), ha reiterado que existe "un acuerdo firmado" y que Iberdrola y Naturgy "respetarán" lo suscrito.

Sobre "qué hará Endesa", Sánchez Galán ha pedido a los medios que se lo pregunten a esta última mercantil, y ha subrayado que "hay que respetar lo firmado".

La asamblea de propietarios de la central de Almaraz se reunirá este martes, después de que el pasado 12 de marzo las empresas que se reparten la propiedad de la planta (Iberdrola, con un 53 %; Endesa, con un 36 %, y Naturgy, con un 11 %) volvieran a discrepar sobre la forma de presentar la solicitud.

Iberdrola y Naturgy querían vincular la petición de la renovación del permiso de explotación, por los años recogidos en el protocolo, a condiciones económicas y a las inversiones a efectuar. Es decir, que el reactor 1 de Almaraz siga funcionando 7,4 años más y el reactor 2 durante 8,2 años más, con lo que la planta cacereña extendería su operación hasta 2028.

En su opinión, la planta estaría operando hasta el final de la presente década y el proceso de desmantelamiento de la misma se prolongaría durante 15 años, por lo que la comarca extremeña de Campo Arañuelo -donde se ubica Almaraz- tendrá trabajo durante 25 años, al margen de los distintos proyectos de renovables que Iberdrola tiene en la región.

"Tenemos varios proyectos que van a sustituir perfectamente la energía que dejará de producirse -en Almaraz- y con muchos más empleos", de los que actualmente existen, ha explicado.

Por su parte, el expresidente de la Junta de Extremadura José Antonio Monago, en declaraciones también a la prensa, ha afirmado que "no se puede sustituir la calidad del empleo y el numero de puestos de trabajo de la central de Almaraz por renovables".

"Un millar de megavatios de Almaraz generan miles de puestos de trabajo, y en renovables no llega ni al medio centenar, ha añadido Monago. "No tiene nada que ver una cosa con la otra", ha agregado.

A su juicio, el "esfuerzo por suplantar" a Almaraz "tiene que ser con industria, no con renovables".