Eva Yraola

Davos (Suiza), 23 ene (EFECOM).- El Foro Económico de Davos llega hoy a su ecuador en su edición más descafeinada, ya que las ausencias, como la del presidente estadounidense Donald Trump, han pesado más que las presencias, algo que quizá cambie hoy con la llegada del presidente español, Pedro Sánchez, y el primer ministro japonés, Shinzo Abe.

Pese a que el Foro de Davos ha reunido en su 49 edición a más de 3.000 líderes políticos, empresariales y sociales, la lista de los que no han venido este año es interminable.

Además de Trump, han fallado este año a su cita en la localidad alpina la primera ministra británica, Theresa May, ocupada con los coletazos del "brexit", o el presidente francés, Emmanuel Macron, con sus "chalecos amarillos".

Tampoco han venido el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, que conquistó a los asistentes el año pasado con sus calcetines de colores, el todopoderoso presidente chino, Xi Jinping, o el primer ministro indio, Narendra Modi.

El presidente ruso, Vladímir Putin, volverá a ignorar este año a Davos ya que sólo ha acudido una vez, en 2009, en calidad de primer ministro, y la canciller alemana, Angela Merkel, intervendrá mañana pero sin levantar la expectación de antaño, tras anunciar en octubre que no se presentará a la reelección.

Ni siquiera la intervención ayer del recién nombrado presidente de Brasil, el controvertido Jair Bolsonaro, ha levantado los ánimos, quizás porque duró menos de 8 minutos.

Puede que hoy la intervención de Pedro Sánchez ante el Plenario, donde defenderá la fortaleza y fiabilidad de la economía española, constituya un punto de inflexión en un Foro mortecino.

Pero los representantes del mundo de las finanzas no han querido tampoco llenar ese vacío, ya que a la ausencia de Trump se han sumado las de la delegación económica de Estados Unidos, encabezada el pasado año por los secretarios del Tesoro, Steven Mnuchin, y Comercio, Wilbur Ross.

Grandes financieros como el presidente de Goldman Sachs han acudido este año a Davos pero sin hacerse visibles, participando sólo en encuentros privados y no en mesas redondas o debates.

Ese perfil bajo es el mismo que han adoptado los presidentes de los dos grandes bancos españoles, Ana Botín (Santander) y Carlos Torres Vila (BBVA).

Ambos figuran en la lista de asistentes al Foro pero ninguno de ellos participa de forma pública en ningún evento; Torres Vila toma así el relevo de su predecesor, Francisco González (FG), aunque ha eludido participar en actos públicos así como atender a los medios de comunicación. como sí hacía FG.

La que sí está, como cada año, muy presente en el programa de actos es la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, que el lunes presentó en rueda de prensa las previsiones del organismo.

También en un plano mas mundano los Crystal Awards, galardones con los que el Foro de Davos premia la contribución a la cultura que premian la contribución a la cultura y a hacer un mundo mejor, han tenido en esta ocasión menos repercusión.