Muchas veces se han presentado planes estratégicos sobre hipótesis “prudentes y realistas” y este no es una excepción. El Ministerio de Economía ha publicado el nuevo Programa de Estabilidad aprobado por el Consejo de Ministros y remitido a Bruselas que incluye una actualización de las previsiones macroeconómicas para el país, así como la senda de reducción del déficit pactada con la Comisión Europea. El Ejecutivo prevé que la economía española cree 1,8 millones de puestos de trabajo hasta finales de 2019, lo que llevaría el número de ocupados al borde de los 20 millones (19,94 millones). Esto permitirá a la tasa de paro caerá hasta el 13%, esto es, 8 puntos menos del 21% actual, en términos de la EPA (Encuesta de Población Activa).

El ministro de Economía en funciones, Luis de Guindos, ha asegurado que es "perfectamente posible" alcanzar un nivel de empleo de casi 20 millones de personas trabajando en 2019 si no se cometen errores de política económica, ha alertado. 

“Se trata de previsiones prudentes y realistas que sustentan y hacen creíble la senda de reducción del déficit público que sitúa el desequilibrio fiscal por debajo del 3% el año próximo”, ha indicado el Ministerio de Economía en una nota remitida hoy. El objetivo último es llevar al déficit hasta el 1,6% del PIB al final del Programa de Estabilidad, en 2019.

Este ritmo de creación de empleo será posible por una economía que seguirá avanzando con fuerza en los próximos años, siempre según los cálculos del Ejecutivo. En concreto, el Gobierno prevé que el crecimiento medio durante estos cuatro años sea del 2,5%: del 2,7% este año, del 2,4% para 2017 y del 2,5% para 2018 y 2019.

Si este 2,7% de crecimiento se cumple, a niveles del año próximo tendríamos los niveles de renta y de PIB que teníamos antes del inicio de la crisis

Según Guindos, “si este 2,7% de crecimiento se cumple, a niveles del año próximo tendríamos los niveles de renta y de PIB que teníamos antes del inicio de la crisis”. Estos planes del Gobierno supone que España "mantendrá un diferencial positivo [de crecimiento] de más de medio punto en el crecimiento a lo largo de estos años".

Como ya adelantó Guindos, España pide a Bruselas una prórroga de sólo un año para cumplir con el Programa de Estabilidad de bajar el déficit por debajo del 3% del PIB. El objetivo del déficit queda repartido del siguiente modo:

El Gobierno en funciones deja firmado un Programa en el que el peso del gasto público sobre el PIB va cayendo de forma paulatina desde el 43,3% de 2015 hasta el 40,1% planeado para 2019. Esto se conseguirá elevando el PIB y la recaudación por la vía de los estabilizadores automáticos y no recortando el gasto público, que, en términos absolutos, seguirá aumentando, desde los 468.000 millones de euros de 2015 hasta los 506.000 millones de 2019.

De este modo, el Gobierno vuelve a basar sus expectativas en el buen desempeño de la economía durante los próximos años, lo que permitirá, según sus estimaciones, conseguir superávit fiscal primario en el año 2018. Esto significa que el saldo presupuestario en 2018, antes del pago de los intereses de la deuda, ya será positivo, del 0,4%.