La vicepresidenta Nadia Calviño, en la jornada 'Transformar la Administración para modernizar España'.

La vicepresidenta Nadia Calviño, en la jornada 'Transformar la Administración para modernizar España'.

España

El Gobierno quiere revisar el lenguaje que usa la Administración Pública en los canales digitales

Nadia Calviño anuncia a bombo y platillo unos talleres entre funcionarios y ciudadanos para identificar los puntos menos comprensibles de los trámites online.

10 marzo, 2023 01:28

El Gobierno mantiene sus planes en torno a la tan necesaria modernización de la Administración. Ese es el mensaje que la plana mayor del Ejecutivo quiso transmitir durante una jornada organizada en Madrid en la que se recordaron algunos de los principales hitos en esta materia, como la carpeta ciudadana o la innovación en la gestión de solicitudes del kit digital.

Un recordatorio para marcar terreno de cara a los inminentes comicios autonómicos y locales, en el que el secretario general de Administración Digital, Juan Jesús Torres, hizo hincapié en la partida de 3.165 millones de euros del presupuesto destinado a digitalizar la Administración Pública. Un montante que se destinará, principalmente, a cinco grandes bloques temáticos: atención a la ciudadanía, automatización de procesos, gestión del dato, infraestructuras y comunicaciones o ciberseguridad.

En ese sentido, la secretaria de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial, Carme Artigas, destacó que "el 65% de los españoles ya interacciona con algún servicio público online de manera habitual". Por ello, considera la exempresaria, estamos ante un momento en que podemos "sentirnos orgullosos de que la Administración Pública sea un motor de innovación de nuestro país. Y es que innovar no es un objetivo, es una obligación".

Carme Artigas, secretaria de Estado de Digitalización e IA, durante la jornada 'Transformar la Administración para modernizar España'.

Carme Artigas, secretaria de Estado de Digitalización e IA, durante la jornada 'Transformar la Administración para modernizar España'.

Artigas, en entrevistas con D+I, siempre ha reconocido el retraso y las numerosas trabas e ineficiencias que sigue arrastrando la administración digital. "No podemos pretender desarrollar las capacidades digitales del país si la AAPP no se moderniza. Nuestra Administración ha hecho muchos avances respecto a Europa, pero necesitamos actualizarla con herramientas de nueva generación", comentaba a este medio.

Calviño y el decálogo del lenguaje claro

El cierre de la jornada correspondía a la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, de quien se esperaba algún gran anuncio que diera el barniz de actualidad a este maratón de revisionismo del camino ya andado y por andar. Y hubo anuncio, sí, aunque de mucho menor calado del demandado por la audiencia.

[Carme Artigas: "España no quiere ser testigo, sino protagonista de los grandes cambios digitales"]

En ese sentido, Nadia Calviño anunció que impulsará en la Administración Central un Decálogo del Lenguaje Claro, con el que busca impulsar la comprensión de los trámites digitales por parte de los ciudadanos. Para ser más exactos, lo que pretende el Ejecutivo es simplificar el número de portales con los que cuenta el sector público y ampliar el número de chatbots y asistentes de voz que ayuden al usuario a encontrar el trámite que necesitan.

Un camino en el que ese "lenguaje claro" al que se refiere la vicepresidenta deberá ser omnipresente. Para asegurarse de que todos los puntos de contacto con la AAPP sean sencillos de entender, el Gobierno creará talleres para que funcionarios y ciudadanos identifiquen los puntos menos comprensibles y, finalmente, se elaboren guías para mejorarlos.

El éxito de la Carpeta Ciudadana

La vicepresidenta primera también ha destacado la importancia de la aplicación 'Mi Carpeta Ciudadana' como uno de los ejemplos de lo que debe ser la Administración en el siglo XXI y ha remarcado el orgullo por la buena acogida del proyecto. Calviño ha remarcado que esta transformación de la Administración es una de sus prioridades y ha resaltado la "capacidad tractora transcendental" que tiene la Administración Pública a la hora de transformar el país.

Recordemos que la Carpeta Ciudadana fue lanzada por vez primera en 2016, con Mariano Rajoy como presidente del Gobierno. Fue una iniciativa pionera en nuestro país, que buscaba unificar en un único portal todas las relaciones de los ciudadanos con la Administración, desde la gestión de expendientes a la solicitud de certificados... y de ahí al infinito. Sin embargo, este proyecto apenas tuvo éxito: en 2021, registró 208 millones de accesos, con su particular récord mensual en marzo de 2022, cuando hubo 26 millones de solicitudes al sistema. Y es que, de su ambiciosa propuesta inicial, tan sólo quedaron la consulta de algunos expedientes y una creciente gestión de notificaciones. 

La revisión de esa Carpeta Ciudadana y el lanzamiento de su versión móvil se produjo en pleno 2022, con una primera versión beta hasta diciembre. Según explicó el Ejecutivo en aquel entonces, busca ser la "primera gran solución digital para toda la ciudadanía de la legislatura", al mismo tiempo que "reducir la brecha digital de la anterior versión, que venía funcionando en web con un aspecto más o menos amigable...". El presupuesto total de esta aventura es de 750.000 euros.

La máxima responsable económica señaló como cierre que la transformación digital de la Administración es un proceso que lleva años en marcha y que se ha acelerado gracias a los fondos europeos. Asimismo, ha hecho hincapié en que algunas mejoras en campos como la ciberseguridad o la nube son complicados de explicar de cara al ciudadano, ya que, en el caso del primer tema por ejemplo, el éxito se basa en que "no pase nada" en referencia a evitar una brecha de datos o un ciberataque.

Un gran trecho por recorrer en digitalización

El retraso en materia digital de la Administración Pública es ingente y, por si nos sirve de consuelo, no es un problema únicamente español. La prueba la encontramos, sin ir más lejos, en las cifras de inversión en digitalización del sector público en todo el mundo, que crecen a ritmo de infarto.

En 2021, por ejemplo, el gasto dedicado a soluciones y servicios TI en todo el mundo superó los 535.382 millones de dólares, un 8,9% más que el curso anterior. Y si bien en 2022 se ha visto una ligera ralentización de esta dinámica (con una inversión de 551.458 millones, un 3% más), el buen latido de los gobiernos volverá a hacerse notar en 2023, cuando superemos los 588.900 millones de partidas ligadas a lo digital, un 6,8% más que este año.

Son cifras de la firma de análisis Gartner, según la cual el gasto en Tecnologías de la Información y las Comunicaciones aumentará en todos los segmentos, excepto en la compra de dispositivos. El mal comportamiento de este bloque responde, explican los expertos, a que los empleados públicos están "extendiendo la vida útil de los dispositivos que adquirieron al comienzo de la pandemia".

Con ello, el software será el segmento de mayor crecimiento en 2023, seguido de los servicios de TI y los servicios internos. La razón de esta jerarquía es fácil de identificar: iniciativas como la migración de servicios a la nube, la modernización de aplicaciones y el fortalecimiento de la seguridad de la red se encuentran entre las principales prioridades de innovación en las que se centran los gobiernos para mejorar la participación y la satisfacción de los ciudadanos.

Eso de cara a 2023, porque lo vivido en el presente curso arroja sensaciones agridulces en función de a qué capa de lo digital prestemos atención. Por ejemplo, este 2022 hemos sufrido caídas sustanciales en la inversión en telecomunicaciones (-5,5%), servicios internos (-2%) y, por supuesto, en dispositivos (-7,3%). Sólo el empuje del software (+9,3%) y los servicios TI (+4,5%) han mantenido el buen devenir de la cifra global... no en vano, también son las dos partidas de mayor volumen con 162.803 y 193.925 millones de dólares de gasto.