Xavi Pont, cofundador y 'Managing Partner' de Ship2B Ventures y miembro de la Asamblea de SpainNAB.

Xavi Pont, cofundador y 'Managing Partner' de Ship2B Ventures y miembro de la Asamblea de SpainNAB.

Opinión HACIA UNA ECONOMÍA DE IMPACTO / SPAIN NAB

Emprender con propósito: el poder de las startups de impacto

Xavi Pont
Publicada

Vivimos tiempos de urgencia. El cambio climático, el envejecimiento poblacional y la creciente desigualdad social están desbordando la capacidad de respuesta de nuestros sistemas económicos y sociales. Además, cada año batimos récords de temperatura y más del 20% de la población europea tendrá más de 65 años en 2030. Ante este escenario, se hace evidente que necesitamos nuevas formas de abordar los grandes retos globales: soluciones audaces, ágiles y, sobre todo, profundamente transformadoras.

En este contexto, el emprendimiento de impacto emerge como una de las palancas más poderosas. Nace con la vocación de desafiar el statu quo y generar resultados concretos tanto en la vida de las personas como en la salud del planeta. Pero, para que su potencial transformador se materialice, es esencial un enfoque riguroso, con impacto y rentabilidad como motores inseparables.

Las startups pueden ser agentes clave de cambio sistémico cuando nacen con una misión clara. No se trata solo de crecer o innovar, sino de hacerlo resolviendo problemas sociales o ambientales específicos, con modelos de negocio sostenibles y escalables.

Y nuestra labor como inversores es identificar a esos equipos que, desde el primer día, sitúan el impacto en el centro de su estrategia empresarial. Equipos comprometidos con transformar realidades, no solo con innovar productos. Para que esa transformación no sea fruto del azar ni de la intuición, es necesario aplicar un enfoque sistemático. Evaluar si el problema está bien definido, si la teoría del cambio es coherente, y si existe una conexión directa y medible entre el impacto buscado y el modelo de negocio. 

Por ejemplo, una clara apuesta por la alineación entre propósito y rendimiento es vincular los propios incentivos económicos al cumplimiento de objetivos de impacto. Solo así puede evitarse el riesgo del llamado impact washing, especialmente en un momento en que el sector está creciendo exponencialmente: en 2023, la inversión de impacto superó los 1,1 billones de dólares a nivel global, según datos de la Global Impact Investing Network (GIIN).

El impacto no se improvisa. Se diseña desde el inicio. Por eso nuestro foco está en etapas tempranas (pre-seed y seed), cuando las decisiones fundacionales aún pueden moldear la cultura y el ADN del proyecto. En esos momentos, el acompañamiento va mucho más allá del capital: ayudamos a los emprendedores a integrar criterios de sostenibilidad, equidad y buena gobernanza desde el diseño de producto hasta la estrategia de escalabilidad.

Y el resultado de este enfoque se deja ver en métricas concretas: inversión en más de 50 startups que, a su vez, han beneficiado a más de 400.000 personas, generado más de 900 empleos directos y seguimos avanzando en nuestro objetivo de reducir 1 millón de toneladas de CO₂ a través de soluciones en movilidad, eficiencia energética y economía circular. Además, hay otro dato revelador: el 60% de nuestras participadas están lideradas por mujeres, muchas de ellas como CEO. Este liderazgo diverso no es casualidad, sino consecuencia de incorporar una mirada activa de género desde la inversión.

Además del acompañamiento individual a cada proyecto, empieza a tomar forma una comunidad viva de fundadores y fundadoras que comparten aprendizajes, colaboran y se apoyan mutuamente. Los llamamos Impact Makers y demuestran que, ya que el emprendimiento de impacto puede ser solitario y exigente, resulta fundamental contar con una red de confianza para sostener el camino y generar una infraestructura de cambio duradera.

Una visión sistémica: más allá de startups

¿Y si los grandes cambios que necesitamos no vinieran de las grandes corporaciones, sino de pequeñas startups decididas a hacer las cosas de forma distinta? Estas empresas no sólo resuelven problemas: cuestionan las lógicas dominantes, abren caminos nuevos y generan modelos más justos y replicables. Esta capacidad de transformación ha impulsado en los últimos años una evolución hacia una visión más sistémica del impacto.

Por ello, junto a la Fundación Ship2B, no nos centramos únicamente en escalar empresas individuales, sino que apostamos por escalar capacidades colectivas capaces de transformar sectores enteros. Esto implica desarrollar plataformas de cambio que combinan inversión, conocimiento, incidencia política y construcción de ecosistemas.

Algunos de los ámbitos en los que esta lógica se está aplicando ya incluyen la salud e innovación médica accesible, la educación transformadora y equitativa, y la regeneración ecológica frente al cambio climático. Se trata de abordar los retos no solo desde el emprendimiento, sino también desde la colaboración estructurada entre actores públicos, privados y sociales.

En este proceso, redes como SpainNAB, de la que formamos parte a través de su Asamblea, han desempeñado un papel fundamental. Su trabajo ha sido clave para fortalecer la narrativa del impacto en España, movilizar actores diversos y contribuir al desarrollo de marcos regulatorios que faciliten la inversión con propósito, como los contratos de impacto social o la agenda de finanzas sostenibles. Este tipo de infraestructuras son esenciales para que la inversión de impacto no se quede en experiencias aisladas, sino que se convierta en una herramienta real de transformación económica y social.

La inversión de impacto ya no es una promesa lejana. Es una realidad que demuestra que rentabilidad y propósito pueden ir de la mano. Y más importante aún: ofrece una alternativa concreta para quienes desean contribuir al bien común desde lo económico.

La pregunta ahora es: ¿qué haríamos si pudiéramos invertir nuestro talento, nuestro capital o nuestro tiempo en proyectos que no solo funcionen, sino que realmente transformen el mundo?

El momento para actuar es ahora.

***Xavi Pont es cofundador y Managing Partner de Ship2B Ventures y miembro de la Asamblea de SpainNAB.