UmiBeach durante el testeo del prototipo en la playa La Malvarosa (Valencia).
Robots autónomos y bañistas cohabitan en las playas este verano: la pionera apuesta de Umibots y FCC en Santander
Estos robots de tecnología española y 100% autónomos recogen con IA de última generación hasta 25 kilos de colillas, botellas y plásticos.
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Tecnología, innovación y sostenibilidad se darán la mano a partir del próximo 25 de julio en la emblemática playa del Sardinero de Santander, gracias a una pionera propuesta que tiene a la robótica autónoma e inteligente de la startup Umibots como epicentro.
Imaginen robots que cohabitan con personas en armonía en cualquiera de las costas de nuestro país y que se ocupan de las labores de limpieza de forma segura como el retirado de las siempre molestas y nocivas colillas.
No hace falta que hagan elucubraciones. Esa estampa será una realidad en diez días en Santander y, según ha confirmado la disruptora startup a esta redacción, la previsión es ampliarla a otros emplazamientos del litoral español en el futuro.
Oportunidades para implementar su tecnología no van a faltar. España, con más de 3.550 playas y más de 8.000 kilómetros de costa este año, según la Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y del Mar, cuenta con 48 banderas negras -dos por provincia y ciudad autónoma de media-, según datos de Ecologistas en Acción.
Las colillas son el principal motivo de esta radiografía -a todas luces mejorable-, debido al microplástico que contienen que puede tardar más de una década en degradarse. También liberan sustancias tóxicas como plomo, arsénico o amoniaco, que acaban envenenando los ecosistemas marinos.
La propuesta de Umibots está permitiendo a la UTE de FCC Medio Ambiente y Ingesan OHLA de Santander incorporar por primera vez robots 100% autónomos e inteligentes para optimizar la limpieza de playas y atajar de raíz este problema.
Los robots UmiBeach, a pesar de su pequeño tamaño, son capaces de retirar hasta 25 kilos de colillas, plásticos y otros residuos tóxicos. Y lo hacen sin molestar ni interferir con los bañistas, matizan desde Umibots, "respetando desde toallas, hamacas a personas y detectando incluso los cambios en las mareas".
Fundador y CEO de Umibots, Clodo González.
Este robot autónomo altamente disruptivo ha sido diseñado para alimentarse de cargas de energía solar. También integra IA avanzada para la detección de personas y obstáculos mediante un triple sistema de seguridad basado en visión artificial que permite recalcular trayectorias, esquivar obstáculos, personas y desniveles, o bien detenerse si es necesario.
"Se trata de robots altamente seguros y eficaces, cuyo prototipo dotado de alta ingeniería ha sido testado con excelentes resultados en la playa de La Malvarrosa de Valencia durante seis meses", ha afirmado Clodo González, fundador y CEO de Umibots. Y añade: "Con el uso de esta tecnología se podrían eliminar, durante la temporada estival, hasta el 100% de los residuos tóxicos más contaminantes de las playas españolas".
Un robot diseñado para la arena
Con un equipo de físicos, ingenieros de robótica y electrónica industrial que ha innovado con soluciones que no existen en el mercado, el robot está diseñado específicamente para la superficie de la arena a través de un sofisticado sistema avanzado de cribado de arena y autodescarga. El dispositivo puede ser configurado en función de la hora, las condiciones climatológicas o la saturación de la playa.
Dotado de navegación por satélite, lo que le permite crear un mapeo del entorno, el UmiBeach toma decisiones detectando personas y obstáculos como toallas en el suelo y la línea del mar, con total facilidad.
24 horas de trabajo ininterrumpido
Además, opera a través de sus cámaras de visión artificial que, junto con alarmas visuales y acústicas, garantizan la seguridad tanto de día como de noche, ya que al disponer de conexión 5G avisa de hurto por geolocalización.
Con una velocidad máxima de dos metros por segundo es capaz de trabajar 24 horas de forma ininterrumpida en condiciones climatológicas adversas sin la supervisión humana. Además, puede alcanzar una velocidad de 6,5 Km/h y acceder a zonas imposibles por otro tipo de tecnología más pesada.
En definitiva, una propuesta para entender cómo la irrupción de la robótica avanzada, el papel de la IA y la digitalización están permitiendo la mejora en costes y eficiencia de un servicio esencial para el turismo y la sostenibilidad de nuestros mares y océanos. Y además, con tecnología 100% española.