"No podemos hablar de defensa sin abordar la parte cibernética: si todo está conectado, todo puede ser hackeado", con esta frase la presidenta de la Comisión Europea (CE), Ursula Von der Leyen, resumía la posición del organismo en materia de protección virtual el pasado mes de septiembre.

Hace apenas unas semanas estas intenciones se materializaron con la aprobación del programa de trabajo anual del Fondo Europeo para la Defensa (FED), dotado con 924 millones de euros.   

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Según explica el organismo, la iniciativa anunciada introduce herramientas destinadas a promover la innovación en materia de protección, todas ellas inscritas en el marco del nuevo Plan de Innovación de la UE en materia de Defensa (EUDIS).

En total, el presupuesto acordado irá destinado a 33 temas estructurados en 8 convocatorias de propuestas que se abrirán a partir de este mes de junio para poner en marcha "grandes proyectos emblemáticos" que partan de un "entendimiento común" y permitan aumentar la competitividad industrial y la interoperabilidad dentro de la región.

Dos "ámbitos críticos": espacial y naval 

De la suma completa de dinero presupuestado en esta medida, más de 240 millones irán destinados a "dos ámbitos críticos": el espacial y el naval. 

El primero recibirá 150 millones para el desarrollo de herramientas de alerta temprana a los misiles y capacidades innovadoras de observación de la Tierra basadas en sensores múltiples "con fines de inteligencia, vigilancia y reconocimiento". Además, se asignará financiación para la investigación de un sistema capaz de colocar pequeños satélites en distintos tipos de órbitas de forma rápida. 

El segundo, presupuestado en 130 millones de euros, dedicará el montante a la fabricación de buques especiales adecuados para pequeñas y medianas armadas, así como a la vigilancia naval que permita hacer frente a "amenazas nuevas y cambiantes".

67 millones enfocados en la ciberseguridad

Dentro del montante total, también hay espacio para la ciberseguridad, un ámbito donde, según cuentan fuentes de la Comisión Europea a D+I, "el número y la naturaleza de las amenazas está evolucionando rápidamente".

"Debemos defendernos mejor, de manera coordinada junto con los estados miembros y todos los actores involucrados y reforzar nuestra seguridad", señalan. "Es necesario establecer los medios y los pasos adecuados". 

En este sentido, el organismo ha anunciado que 67 millones de euros del total contemplado en el fondo irán destinados a mejorar las capacidades europeas en ciberseguridad y en desarrollar herramientas en materia de defensa frente a la guerra cibernética y de la información. 

La misma fuente explica a este medio que se necesitan más inversiones en I+D cibernético para "mejorar la conciencia" y "fortalecer las capacidades operativas", donde se incluyen desde las plataformas de entrenamiento hasta los ejercicios enfocados en la interoperabilidad. 

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"Las vulnerabilidades identificadas revelan una alta dependencia de la UE de terceros países en tecnologías de ciberseguridad y ciberdefensa, lo que tiene un efecto claro en la autonomía estratégica de la región", precisa. 

De esta forma, apunta que incentivar la cooperación en I+D en ciberseguridad "está en línea" con la ambición de la Unión Europea de "fortalecer la resiliencia cibernética y el desarrollo de capacidades", a la vez que "es coherente" con los objetivos señalados en el paquete de defensa dado a conocer el pasado mes de febrero. 

"Se prestará atención especial a los proyectos que aborden las nuevas tecnologías que luchan contra las amenazas emergentes y en evolución", concluyen. 

70 millones para "la superioridad de la información"

Asimismo, otros 70 millones se destinarán a proyectos relacionados con la "superioridad de la información" que contribuyan al desarrollo de un sistema de control europeo y de un puesto de mando desplegable para operaciones especiales, según precisan fuentes de la Comisión Europea a este medio. 

Otra parte irá a parar a promover la interoperabilidad y el intercambio de datos entre los centros de control civil y militar en el contexto del cielo único europeo.

Por otro lado, en el fondo también tendrá cabida la transformación digital, a la que se destinarán 50 millones de euros para investigar bases de datos compartidas para el reconocimiento por imagen o la detección de amenazas ocultas. Otros 40 millones se enfocarán en el uso de tecnologías disruptivas para finalidades defensivas. 

El presupuesto también pondrá el foco en otras vertientes como en el desarrollo de un avión de transporte táctico, la guerra electrónica aérea o las tecnologías y los componentes sostenibles para aplicaciones submarinas. 

"Un paso importante" para estimular la innovación

El organismo precisa que esta medida se centra en las tecnologías y capacidades de defensa pertinentes "en consonancia con las prioridades de la UE" acordadas por los estados miembros. Asimismo, el trabajo definido para 2022 también garantizará la continuidad de algunos proyectos iniciados en los programas anteriores. 

Margrethe Vestager, vicepresidenta de la Comisión y responsable de Competencia, precisó durante la presentación de la iniciativa que es "un paso importante" por parte del organismo en el que se cuenta con nuevos instrumentos para estimular la innovación en materia de defensa aprovechando "la experiencia adquirida durante décadas" y "en favor de la cooperación".

Mientras, Thierry Breton,comisario de Mercado Interior, señaló que, "en el nuevo contexto de seguridad", estas inversiones contribuirán a "subsanar la brecha europea en materia de defensa". "Como complemento del esfuerzo de inversión del FED en el desarrollo de capacidades, ahora debemos avanzar hacia la contratación pública conjunta en este ámbito", añadió.