La vicepresidenta de la Comisión y responsable de Competencia, Margrethe Vestager, durante una comparecencia en la Eurocámara

La vicepresidenta de la Comisión y responsable de Competencia, Margrethe Vestager, durante una comparecencia en la Eurocámara Parlamento Europeo

Europa

Desconexión, aula conectada, ciberseguridad y reducción de brechas: así es la nueva 'constitución digital europea'

La Comisión Europea eleva al Parlamento una carta muy similar en objetivos a la que se aprobó en España el pasado mes de julio.

26 enero, 2022 12:28

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La vicepresidenta ejecutiva para una Europa Adaptada a la Era Digital, Margrethe Vestager, ha presentado este miércoles una declaración de derechos y principios digitales que será elevada para su aprobación al Consejo y al Parlamento Europeo.

Esta presentación llega medio año después de que aquí en España se produjera un movimiento idéntico por parte del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con la Carta de los Derechos Digitales.

Aquel día, Sánchez explicó que "con esta Carta se busca reforzar y ampliar los derechos de la ciudadanía, generar certidumbre a la sociedad en esta nueva realidad digital y aumentar la confianza de las personas ante la disrupción que representa la tecnología".

Con este ejercicio, dijo, "España se sitúa a la vanguardia internacional en la protección de derechos de la ciudadanía y esta Carta señala el camino por el que debemos transitar".

Y ese camino es el que parece haber seguido la Unión Europea con la publicación de esta declaración que, en esencia, persigue objetivos similares.

Así, la Comisión propone al Parlamento Europeo y al Consejo que firmen una declaración de derechos y principios que guiarán la transformación digital en la UE.

"Si bien la pandemia ha acelerado el ritmo de esta transformación, también ha aumentado la brecha digital en la Unión Europea, no solo entre países bien conectados, áreas urbanas y territorios rurales y remotos, sino también entre aquellos que pueden beneficiarse plenamente de un entorno digital enriquecido, accesible, interoperable y seguro, y aquellos que no pueden", reza esta comunicación dirigida a las altas esferas europeas.

Los objetivos principales

El proyecto de declaración sobre derechos y principios digitales tiene como objetivo dar a todos un punto de referencia claro sobre el tipo de transformación digital que Europa promueve y defiende.

También proporcionará una guía para políticos y empresas cuando se trata de nuevas tecnologías, según se explica desde la institución europea.

Los derechos y libertades consagrados en el marco jurídico de la UE y los valores europeos expresados por los principios, deben ser respetados "también on line".

De esta forma, y una vez aprobada conjuntamente, la Declaración también definirá el enfoque de la transformación digital que la UE impulsará en todo el mundo.

La vicepresidenta Vestager explica que "queremos tecnologías seguras que funcionan para las personas y que respetan nuestros derechos y valores. También cuando estamos en línea. Y queremos que todos estén empoderados para tomar parte activa en nuestra cada vez más digitalizada sociedad".

En este sentido, "esta declaración nos da un punto de referencia claro sobre los derechos y principios para mundo on line".

El comisario de Mercado Interior, Thierry Breton, por su parte, indica que "el objetivo es que los europeos sepan que para vivir, estudiar, trabajar o hacer negocios en Europa, pueden contar con conectividad de primera clase, sin problemas acceso a los servicios públicos, un espacio digital seguro y justo".

La declaración de derechos y principios digitales "también establece de una vez por todas que lo que es ilegal en el espacio físico también debe ser ilegal on line".

Datos de interés

Esta comunicación parte de algunos datos que hablan a las claras de la situación digital que vive el Viejo Continente. Así, el informe enviado al Consejo y al Parlamento refleja que el 40% de los europeos no son conscientes de que sus derechos también deben ser respetados on line.

También se advierte que el 72% de europeos quiere saber cómo es procesan sus datos cuando usan las redes sociales o que la mitad de usuarios de internet en 2019 informó que sus preocupaciones por la seguridad on line limita sus actividades.

Por ello la Comisión establece que el proyecto de declaración cubre derechos y principios clave para la transformación digital, como colocar personas y sus derechos en el epicentro, apoyando la solidaridad y la inclusión, asegurando la libertad de elección, fomentando la participación en el espacio público digital, aumentando la seguridad, la protección y el empoderamiento de las personas y la promoción de la sostenibilidad del futuro digital.

Estos derechos y principios deberían acompañar a las personas de la UE en su vida cotidiana, por lo que la declaración persigue hacer asequible la conectividad digital de alta velocidad en todas partes y para todos, contar con aulas bien equipadas y maestros capacitados digitalmente, acceso continuo a los servicios públicos, un entorno digital seguro para los niños, desconectar después de las horas de trabajo, obtener información fácil de entender sobre el medio ambiente impacto de nuestros productos digitales, controlando cómo se utilizan sus datos personales y con quién están compartido.

Se trata de derechos que, formulados de distinta forma, se asemejan bastante a los que contiene la Carta de Derechos Digitales española firmada en julio de 2021.

En ella, hay seis categorías principales de derechos, que abarcan todos los ámbitos de incertidumbre y riesgo: derechos de libertad; derechos de igualdad; derechos de participación y de conformación del espacio público; derechos del entorno laboral y empresarial; derechos digitales en entornos específicos y derechos de garantías y eficacias.

Sánchez y Calviño, durante la firma de la Carta de Derechos Digitales.

Sánchez y Calviño, durante la firma de la Carta de Derechos Digitales.

La declaración europea, cabe recordar, tiene sus raíces en la legislación de la UE, desde los Tratados hasta la Carta de los Derechos Fundamentales, pero también la jurisprudencia del Tribunal de Justicia.

El ex presidente del Parlamento Europeo, David Sassoli, promovió la idea del acceso a la Internet como un nuevo derecho humano allá por 2018. Promover e implementar los principios establecidos en la declaración será un compromiso político y una responsabilidad compartidos tanto en la Unión como en los Estados miembros a nivel estatal dentro de sus respectivas competencias.

Para asegurarse de que la declaración tendrá efectos sobre el terreno, la Comisión propuso en septiembre seguir los progresos, evaluar las lagunas y proporcionar recomendaciones para acciones a través de un informe anual sobre el 'Estado de la Década Digital'.

El proceso, que se espera que culmine el próximo verano con la aprobación de la declaración "al más alto nivel", arrancó el 9 de marzo de 2021, cuando la Comisión expuso su visión de la transformación digital de Europa para 2030 en su Comunicación sobre la Brújula Digital: el camino europeo para la Década Digital.

Antecedentes

En septiembre 2021, la Comisión introdujo un marco de gobernanza sólido para alcanzar los objetivos digitales en con un Camino hacia la Década Digital. En un discurso en el evento 'Leading the Digital Decade' en Sines, Portugal, el 1 de junio de 2021, la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, declaró que "acogemos nuevas tecnologías pero mantenemos nuestros valores".

La Comisión también llevó a cabo una consulta pública abierta que mostró un amplio apoyo a Principios Digitales Europeos. Tanto es así que 8 de cada 10 ciudadanos de la UE consideran útil que la Unión Europea defina y promueva una visión europea común sobre los derechos y principios digitales, así como una Encuesta Eurobarómetro.

Las encuestas anuales del Eurobarómetro recopilarán datos cualitativos, basados en las opiniones de los ciudadanos. percepción de cómo se aplican en la UE los principios digitales consagrados en la declaración.

La declaración también se basa en iniciativas anteriores del Consejo, incluida la Declaración de Tallin sobre administración electrónica, la Declaración de Berlín sobre la sociedad digital y el gobierno digital basado en valores, y la Declaración de Lisboa para un modelo de transformación digital que refuerza la dimensión humana del ecosistema digital con el Mercado Único Digital como eje.