Carme Artigas, secretaria de Estado de Digitalización e IA, en un encuentro organizado por la Fundación SERES.

Carme Artigas, secretaria de Estado de Digitalización e IA, en un encuentro organizado por la Fundación SERES.

España

Carme Artigas propone crear una agencia internacional similar a la atómica para supervisar la IA

La secretaria de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial defiende que el camino regulatorio de Europa pronto será "la única vía" para gestionar el avance de esta tecnología y evitar sus efectos negativos a escala global.

17 mayo, 2023 01:10

"Hace tres años estábamos sólos en el empeño por regular la inteligencia artificial y ahora todos miran lo que estamos haciendo". Así se contundente se muestra la Secretaria de Estado de Digitalización e IA, Carme Artigas, al respecto de los avances que España y la Unión Europea están llevando a cabo para dotar de un marco regulatorio claro a esta tecnología de vanguardia.

"Europa era la tercera vía ante los enfoques de China y Estados Unidos, pero está quedando claro que es la única vía posible", añadía Artigas en un encuentro de la Fundación SERES.

La secretaria de Estado considera que las aproximaciones de Estados Unidos y China con respecto a los datos y la IA son problemáticas. "EE.UU. trata los datos como propiedad de las empresas, mientras que China los ve como propiedad del gobierno. España y Europa quieren que los ciudadanos controlen sus propios datos y participen en la gobernanza de la IA", explicaba durante esa cita. 

[Análisis: Europa regula la inteligencia artificial en un avance positivo y necesario, pero algo abstracto]

Carme Artigas cree que eventualmente todos los países tendrán que acordar regular la IA a nivel internacional debido a los riesgos para la humanidad. Para ello, propone crear una Agencia Internacional de Supervisión de la IA basada en cómo se reguló la industria nuclear. Por si fuera poco, España también quiere alinear a la UE, EE.UU. y China en la gobernanza global de la IA a través de una nueva alianza centrada en los derechos digitales y la ética.

Artigas se refiere, de este modo, a los riesgos morales, económicos, sociales y existenciales. Admite que la sobrerregulación podría ahogar la innovación pero la falta de ella podría traer consigo daños irreversibles. De ahí la búsqueda de un equilibrio que permita la innovación mientras prohíbe los usos inaceptables de la IA como los sistemas de clasificación social y fomenta políticas para reducir la desigualdad y adaptar las fuerzas de trabajo para los nuevos empleos. 

Las tres vías

La visión de las tres vías que plantea Carme Artigas se viene analizando desde hace tiempo en la arena digital. En uno de los polos, Estados Unidos tiende a una perspectiva de libre mercado, dando mucho poder e influencia a las grandes empresas tecnológicas.

Por el contrario, China suele tener un enfoque más dirigista donde el estado controla estrechamente el desarrollo y uso de la tecnología.

Mientras, Europa busca un enfoque diferente centrado en las personas y los derechos humanos, a hombros de la regulación y buscando asociaciones público-privadas donde las empresas puedan avanzar con la innovación mientras se minimizan los riesgos sociales derivados de ella y se promueven la transparencia y la rendición de cuentas.

No sólo eso: el prisma europeo -como ha recordado la secretaria de Estado- parte de que la IA y otras tecnologías se diseñen desde el principio para mejorar los servicios e igualar las oportunidades de los ciudadanos. 

Carta de Derechos Digitales y 'sandbox' de IA

En ese sentido, la secretaria de Estado ha reivindicado la apuesta española por "configurar una agenda que garantice que la tecnología sirva a las personas y adapte los derechos humanos al mundo digital". Un camino en el que nuestro país ya presentó, allá por 2020, la primera Carta de Derechos Digitales del mundo, que incluye nuevos derechos relacionados con la IA y las neurotecnologías.

Ahora, añade Carme Artigas, España está trabajando a nivel de la UE para regular la IA a través de leyes sobre la gobernanza de los datos, los servicios digitales y los mercados digitales. Además, y a nivel de la UE, España está impulsando iniciativas como un "sandbox regulatorio" en inteligencia artificial que verá la luz próximamente con casos de estudio prácticos que aclaren conceptos complejos como la transparencia algorítmica.