La Asociación Nacional de Operadores Locales de Telecomunicaciones, Aotec, ha enviado al Gobierno una nueva carta pidiendo que no se perjudique a las telecos de menor tamaño en el reparto de concesiones, licencias o subvenciones. Esta vez, el escrito se refiere específicamente a la próxima generación de redes 5G.

Estos pequeños operadores, representados por Aotec, quieren participar activamente en el despliegue del 5G en la España vaciada. Consideran que dejarlo exclusivamente en manos de los tres grandes del sector (Telefónica, Vodafone y Orange) generaría retrasos con respecto a las grandes ciudades, que al estar más pobladas y tener una mayor densidad empresarial e industrial resultan más rentables. 

“La expansión del 5G debe estar abierta a la participación de todos, de manera que se garantice mejor la universalidad territorial. La conectividad es el cimiento de la digitalización y los territorios sin ella, serán pobres digitales”, asegura el presidente de la asociación, Antonio García Vidal. Recuerda que en la propia estrategia del Gobierno sobre el 5G, la lucha contra la brecha digital rural es esencial. Por ello, ha insistido en que las pymes pueden tener un papel decisivo en su expansión al “igual que lo ha tenido con la fibra óptica”.

Vidal señala que “no nos podemos permitir las demoras que se han producido con el 4G, porque aún hay zonas rurales plagadas de fibra donde no existe una cobertura móvil eficiente”. Sin el 5G “habremos perdido todo lo avanzado con la fibra. El incipiente flujo de salida de personas desde las ciudades a los pueblos cesará”.

Próxima subasta, ¿sólo para las grandes?

Aotec envía este escrito coincidiendo con la consulta abierta por la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales sobre la próxima subasta de espectro radioeléctrico. 

Está previsto que la subasta se celebre en el primer trimestre de 2021. En ese proceso se procederán a repartir nuevas licencias de uso de espectro que irán destinadas al despliegue de rede 5G. Al ser una subasta, serán las grandes telecos las que consigan pujar por ellas, salvo que se reserve un espacio con condiciones ventajosas para pymes de telecomunicaciones. 

Otra opción, como propone la propia Aotec, sería instar a los grandes operadores a una cesión parcial de espectro 5G en los municipios de menor densidad de población. 

También proponen recuperar parte del espectro ya asignado -y pagado- por las grandes telecos en otra banda del espectro, la de 3.5 Ghz, que se encuentra en desuso por varios motivos, como los que comentábamos recientemente en este artículo. Aotec sugiere re-licitar esas frecuencias para que otros puedan crear redes multioperador locales, o bien redes privadas sobre las que desarrollar la futura industria 4.0. 

Una cuarta alternativa sería habilitar la figura de un operador neutro: aquel que, sin frecuencias propias, creara una infraestructura de red 5G multioperador en el ámbito de un municipio, y que los operadores con espectro tendrían la obligación de utilizar.

Ayudas públicas

Por último, respecto a los incentivos, Vidal ha defendido que “las ayudas previstas para el 5G deben dar opción a la participación de todos los actores del sector de telecomunicaciones. Cuantos más actores participemos, mayor será su rentabilidad para el país en su conjunto”. La mayor participación de las telecos pequeñas de las ayudas estatales anuales a la extensión de la banda ancha (Programa PEBA-NGA) es una reclamación ya reiterada de Aotec al Gobierno. 

Asimismo, desde la asociación se plantea que junto a las tradicionales ayudas directas a los operadores que lleven a cabo el despliegue, se dedique parte del presupuesto a apoyar proyectos de colaboración público-privada, en los que participen entidades territoriales que quieran coinvertir en el desarrollo de estas infraestructuras de red.
 
Además, Aotec aboga por una gestión descentralizada de parte de los fondos en las entidades territoriales, "que son quienes mejor conocen las necesidades reales de sus áreas", para asegurar una mayor eficiencia. “Las comunidades autónomas deben desempeñar un papel importante en esta nueva generación de movilidad”.

Junto a la vertebración territorial y un mayor fomento de la competencia, la entidad argumenta motivos ecológicos, estéticos y económicos, dado que, en muchos municipios, se crearía una sola infraestructura en lugar de tantas como operadores con espectro, "algo que ha ocurrido con el 4G y sus antecesoras".