El Gobierno ha convocado este jueves su primer Spain Digital Day, un evento liderado por la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, en el que el Ejecutivo ha sacado pecho de todas las inversiones y reformas realizadas en el último año para convertir a España en un país líder en digitalización.

Calviño ha sido la encargada de inaugurar este acto, en el que ha detallado los avances en el desarrollo de la agenda España Digital 2025, presentada en el verano de 2020, y en el Plan de Recuperación Transformación y Resiliencia, en el que la digitalización es uno de los cuatro ejes transversales, junto a la transición ecológica, la cohesión territorial y la igualdad de género. 

Pero para hacer realidad todas las medidas y los proyectos incluidos en estos planes, la vicepresidenta primera ha incidido en que es fundamental que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) estén alineados con todas estas iniciativas. De ahí que las cuentas públicas de los dos últimos años contemplen inversiones en digitalización sin precedentes en España. 

En concreto, Calviño ha remarcado que gracias a los fondos europeos la inversión del Estado en el ámbito de la digitalización en el periodo 2021-2022 multiplica casi por nueve la llevada a cabo en el periodo 2019-2020.

Cifras que, según ha recalcado la vicepresidenta, muestran "el impulso y el verdadero salto tecnológico" que el Gobierno quiere dar en estos años con un impacto a medio plazo. "Reflejan ese salto cuantitativo y cualitativo que vamos a dar desde el punto de vista de la inversión pública y que se ha recogido en los PGE de 2021 y 2022", ha incidido. 

Y es que, según ha insistido Calviño, la ambición detrás del Plan de Recuperación y el hecho de que el grueso de los planes y las inversiones se hayan concentrado en el periodo 2021-2023 indican que no se busca un "cambio progresivo", sino un salto que provoque un cambio con impacto material en el modelo de crecimiento. 

En este sentido, ha incidido en que para ello se está llevando a cabo tanto inversiones, las primeras de la cuales ya se han empezado a conceder este año, como reformas. Entre otras, ha mencionado la Ley General de Telecomunicaciones, la Ley Crea y Crece o la Ley de Comunicación Audiovisual. 

Oportunidades y retos

La vicepresidenta primera ha tenido también palabras de agradecimiento a todo el equipo que conforma el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, al que ha calificado como un dream team, ya que es el "equipo necesario en el momento adecuado" para el país.

Y es que estamos en el momento de "dar este impulso a la digitalización" y de encauzar un proceso que ofrece unas oportunidades "absolutamente extraordinarias", pero, al mismo tiempo, presenta "retos importantes".

Calviño ha insistido en que la recuperación económica "muy fuerte" que está en marcha está acompañada de una digitalización "muy intensa" que se ha acelerado exponencialmente como consecuencia de la pandemia de la covid-19.

Así, ha defendido que el hecho de que en los peores meses de la pandemia España se pudiera mantener en el mundo digital gran parte de la vida que hasta entonces transcurría en el mundo analógico fue gracias a las decisiones e inversiones en infraestructuras que se tomaron con anterioridad. 

En su opinión, esto nos tiene que dar la confianza necesaria para poder abordar el reto que supone tomar las decisiones que marcarán el futuro y colocarán a España en una posición de liderazgo en las próximas décadas.

En este sentido, ha remarcado que desde el Gobierno quieren huir de ese "futuro distópico" de las películas y tomar las riendas y encauzar el proceso de digitalización para que España tenga un futuro "más verde, más digital, más cohesionado", con más igualdad y respetuosos con los valores constitucionales.

Para ello, España cuenta con activos muy importantes para lograrlo, como una redes "sin parangón" en Europa, empresas líderes, un ecosistema vibrante de startups, universidades y centros de investigación líderes, estabilidad, seguridad física y jurídica, unas Administraciones públicas con un buen grado de digitalización y una población abierta al cambio. 

Calviño concluyó que el Gobierno está en el momento de tomar las "decisiones adecuadas" y trabajar intensamente para "no dejar pasar esta oportunidad de futuro", proceso en el que es clave la colaboración con otras administraciones y el sector privado.

"Porque si remamos todos en la misma dirección, podemos lograr estos objetivos ambiciosos y convertir al país en un referente mundial de la digitalización humanista", ha subrayado.