“Ese retuit de José María fue el gran espaldarazo al proyecto de Wayra, uno de los momentos más importantes de mi carrera profesional” reflexiona Paloma Castellano, haciendo referencia al “momentazo” de aquel 20 de septiembre de 2018, en el que el renovado logo de Wayra se proyectó sobre la fachada de Gran Vía 28, en Madrid, en el emblemático edificio de Telefónica.

“Fue idea de Mateo Rouco (director de comunicaciones de Wayra)”, comenta, orgullosa y feliz de cumplir una década al frente de la herramienta disruptiva de la corporate. La moneda aquel día salió muy rentable, y un tuit en el que se reflejaba la imposible y llamativa hazaña, fue refrendado con retuit por la máxima autoridad de Telefónica, su CEO, José María Álvarez Pallete.

Otro tuit dictó éxito, el de Gonzalo Martín Villa, CEO de Telefónica IoT and Big Data Tech: “Si hace siete años cuando empezamos a pensar en Wayra me dicen que un día el logo estaría reflejado en el imponente edificio de Telefónica en Gran Vía, me hubiera muerto de risa”. El delirio estaba servido. “Es una voz autorizada, él lanzó Wayra, representa los orígenes, Gonzalo ha marcado el paso de Wayra y de la innovación en Telefónica ”, le define Paloma Castellano.

“Quería ser periodista”, mide cada palabra como si lo fuera, pero se quedó en directora de Wayra Madrid, ahí es nada. La ingeniera Castellano tira de ingenio para traer una exclusiva a nuestro encuentro en las oficinas de Wayra, que ante tanta noticia referente a la big one española y en vísperas del South Summit, a uno le sabe a zero zero. “Te confirmo que apostamos por Sceenic, invirtiendo 250.000 euros”, herramienta tecnológica que permite la multipantalla entre amigos y familiares durante una emisión televisiva. “Ver el fútbol con amigos cada unos desde su casa”, comenta Rouco, omnipresente durante las dos horas de entrevista con Paloma Castellano.

Respecto a la noticia del mes que marca el inicio del curso y que llega bajo el nombre de Leadwind, el fondo de 250 millones para scaleups anunciado por Telefónica y K-fund. lanzado en los días previos a la publicación de este perfil, Paloma que se manifiesta prudente y nos refiere a la nota de prensa.

Sin duda es un tema que liga con el fichaje del verano (a falta de Mbappe): la marcha de una de las caras más visibles de la aceleradora corporativa, Miguel Arias, al VC de Iñaki Arrola y Carina Szpilka. “Miguel le dio un giro de apertura muy bueno a Wayra, es uno de los mejores profesionales que han pasado por la casa. Había un reto y lo superó con creces. Wayra es lo que es gracias a su paso por Telefónica”, explica Castellano.

Pero la visión de Paloma Castellano viaja a una constelación superior a una exclusiva fugaz que se perderá entre tanta ronda y nombramiento. “El mayor sueño que quiero cumplir es que una línea de negocio de Telefónica salga de aquí, de una de nuestras startups, se muestra tajante.

Paloma Castellano, directora de Wayra Madrid.

Paloma Castellano, directora de Wayra Madrid.

Y a falta de pan... Las piezas están engrasadas y el barco ya carbura con proyectos “tan ilusionantes” como Volava, startup de fitness en la que, tras invertir hace unos meses, se ha posicionado en las principales tiendas físicas de la corporate, “en Gran Vía de Madrid y Plaza Cataluña de Barcelona”, entre otras, con posibilidades reales de venta directa al cliente de Telefónica. “Está funcionando muy bien”, asevera sin concretar datos.

Tanto Castellano como Wayra sienten el apoyo en del CEO de la compañía. “Desde el principio contamos con el apoyo de José María, es una persona muy cercana, un visionario que está arriesgando en una empresa que cuenta con casi de 100 años de historia”. con lo que eso conlleva claro.

El propio Álvarez Pallete insistía este mismo martes en su cuenta de Instagram sobre el camino a seguir: “A día de hoy seguimos reforzando las áreas de innovación y conexión con el ecosistema emprendedor”, publicaba aludiendo al nuevo fondo para scaleups y a los diez años cumplidos por, quizás, su herramienta favorita.

Otras dos personas ‘de la casa’ que marcan su día a día, son Irene Gómez, directora de Innovación Abierta de Telefónica, y Andrés Saborido, CEO de Wayra. La primera “es de las personas que mejor visión estratégica tiene, representa la calma, la paciencia, el trabajo a largo plazo, sabe muy bien lo que quiere y nos aporta mucha serenidad”, la define. El segundo “es uno de los mejores líderes que conozco que ha marcado una época, con su buena comunicación, su clara visión y su gran gestión de los silencios. Siempre nos deja hacer”.

La historia de Wayra no se entendería al completo si obviamos su protagonismo, “desde sus inicios hace diez años como nosotros”, en South Summit, el encuentro de referencia nacional que tendrá lugar del 5 al 7 de octubre en La Nave de Madrid. “Tenemos expectativas altas para esta edición” comenta Castellano, quien define a María Benjumea, creadora de Spain Startup junto con Sofía, como una de las personas “más admirables” del ecosistema, “con una gran ambición y camino recorrido”, señala, “con todo lo que has logrado y conseguido, María, ¿para qué te lías más?” se pregunta de forma irónica.

Ahora toca hablar de cifras y, un servidor, se vuelve a marear como en tiempos de entrevistas con Aquilino, Blanco o el propio Arrola. Wayra Madrid ya ha apostado por más de 80 startups, con 30 activas, 38 pasaron a mejor vida y 15 exits que actualizan las necesitadas vitrinas de la corporate. Wayra cuenta globalmente con un fondo único de cinco millones anuales, dos de ellos irán este año a startups españolas, y tienen como premisas no liderar rondas y no suelen hacer follow-ons. “¿Dónde aporto más valor? Metiendo más huevos en la cesta para que Telefónica vea lo que hay en el mercado”, clara y concisa.

De entre todas las inversiones realizadas desde Wayra Madrid, nuestra protagonista de hoy tiene sus favoritas. Destaca las figuras de emprendedores como Ramón Sastrón, “que me aporta mucho valor”; de Javier Perea, CEO de Smart Protection, “que ha cambiado la empresa refundándola, y levantando una ronda de un millón con 140 profesionales”; o de Lucía Iborra, CEO de VisualNacert, “un referente con una carrera profesional alucinante que está transformando el sector Agrotech”.

No quiere dejar fuera de la lista a la que quizás sean las reinas de la corona, Reloadly, liderada por Michel Francis, “a la que le auguro un futuro de éxito”, o Voicemod cofundada por Jaime Bosch y sus dos hermanos “que estuvieron a punto de quebrar y ahora son una gran compañía con 120 empleados”, o a los emprendedores María Manso, CEO de Tucuvi, “que tiene un perfilazo”; o el sevillano Alejandro Costa, CEO de G&C Sustainable Tech, “que de tener una tienda de barrio ha desarrollado una empresa internacional proveedora de Telefónica, uno de los crecimientos personales más inspiradores que he conocido”.

Está claro que Paloma Castellano es feliz con su trabajo, “me gusta divertirme cada día, soy muy impulsiva y me levanto con síndrome de impostora constante pensando que no lo voy a hacer bien”, analiza. Pero su entorno la avala. Para la inversora y amiga, y persona cercana a ambos, Helena Torras, “Paloma es el ecosistema, siempre positiva e inclusiva, abriendo las puertas de Wayra a todo el mundo, haciendo sentirnos parte de la familia”. Mateo Rouco refrenda esta opinión, “Paloma es la innovación en persona, una apasionada de la tecnología que conoce como nadie la esencia de Wayra y las mejores historias del proyecto desde su mismísimo nacimiento”.

En casa, nuestra entrevistada, según su marido Luis, tampoco se quita el traje de “persona alegre y divertida”, con “enorme capacidad de trabajo dedicando jornadas maratonianas” que hasta en alguna ocasión “la han visto amanecer sin haber dormido un minuto, incluso embarazada de nuestra hija mayor”.

Madre de dos hijos –Carmen de cinco años y Lucas de tres– se declara “una gran lectora” y nos recomienda un libro que le ha marcado, ‘Por quién doblan las campanas’ de su escritor favorito, Ernest Hemingway. Para Paloma Castellano, “todos estamos conectados”, como reza el poema de John Donne que ella misma nos recita, “Ninguna persona es una isla; la muerte de cualquiera me afecta, porque me encuentro unido a toda la humanidad; por eso, nunca preguntes por quién doblan las campanas; doblan por ti”.