Más de 220.000 hectáreas han sido arrasadas por el fuego en lo que va de año por todo el país, según las estimaciones por satélite del Sistema de Información Europeo de Incendios Forestales (EFFIS). Los expertos definen la situación como "crítica" y apuntan que los datos son los peores desde 2020, por delante de 2012, el año con registros de superficie quemada más altos. 

Actualmente, hay activos algunos en regiones como Galicia, Extremadura, Murcia, Navarra, Castilla y León y Asturias, tanto intencionados como por causas naturales (debido al viento o a las altas temperaturas). La mayoría se encuentran en zonas de difícil acceso, lo que complica, aún más, las labores de extinción. 

Con el objetivo de hacer frente a esta complicada situación, están surgiendo iniciativas con base tecnológica que buscan adelantarse a los posibles fuegos o enfrentarse a ellos de la mejor forma posible. Por ejemplo, a nivel estatal, la Unidad Militar de Emergencias (UME) está empleando los datos estadísticos y análisis provenientes del Ministerio de Transición Ecológica, la Aemet y del Centro Europeo de Prevención y Vigilancia para diseñar su estrategia de actuación. 

En este contexto, también surge ALERTAGRAN, un proyecto del Cabildo de Gran Canaria que busca ayudar en la labor de paliar los incendios forestales. 

Mapas en 3D para tomar mejores decisiones 

Esta iniciativa se caracteriza por un simulador 3D para este tipo de fenómenos mediante un escáner pionero que utiliza sistemas de información geográfica (GIS) para analizar datos en tiempo real con los que prever cómo se va a comportar el fuego, a qué zonas alcanzará, cómo se moverá y en qué momento ocurrirá para actuar en consecuencia. 

Este simulador, Wildfire Analyst Enterprise, desarrollado por Tecnosylva con la tecnología ArcGIS de Esri, permite analizar la información recogida desde un punto de vista espacial para plasmarla en un mapa, estudiarla y "tomar decisiones más ágiles y acertadas" ante la gestión de fenómenos meteorológicos adversos.

Según explican desde la firma, el sistema permite el cálculo diario de riesgos a través de recreaciones automáticas de posibles escenarios sobre los incendios. Además, la información puede difundirse también en otros formatos como imágenes, datasets geográficos o tablas para evaluar los escenarios simulados en función de distintos parámetros.

Ejemplo del simulador. Tecnosylva.

Javier Blanco, COO de Tecnosylva, señala a D+I que ALERTAGRAN también cuenta con cámaras de vigilancia que, cuando detectan un punto caliente, generan una simulación de forma automática, lo que permite "contar con una estimación rápida del peligro".

A la par, gracias al convenio con AEMET que tiene suscrito el Cabildo, se disponen los datos de las estaciones meteorológicas estatales y del sistema de predicción meteorológica, "dato de gran importancia para la realización de simulaciones". 

Con todos estos factores, explica, se calcula de forma diaria una estimación del peligro de los posibles incendios en toda la zona de estudio para que se puedan distribuir los recursos necesarios en las zonas más complicadas y disminuir el peligro potencial. 

"Si bien no es posible reducir el riesgo, es posible anticiparse a él y reducir las consecuencias de las emergencias que se declaren", precisa. "Con la simulación podrán detectarse oportunidades de ataque y puntos críticos que deben gestionarse para tratar de evitar que un foco se convierta en un gran incendio forestal". 

Desde enero de este ejercicio, esta iniciativa ha realizado 69.445 simulaciones automáticas, con un total de 556.540 horas simuladas. Esto se traduce en 4.798.202 hectáreas quemadas y 58.549 edificios impactados.

España, Europa y Estados Unidos

Dentro de España, más allá del Cabildo de Gran Canaria, el sistema está en fase de implantación dentro del operativo de la Junta de Andalucía y, según avanza Blanco, están en contacto con otras Comunidades Autónomas que han mostrado interés en él. 

No obstante, el proyecto no ha tenido únicamente España como ámbito de actuación, sino que también ha analizado otras partes de Europa, entre ellas Holanda, gracias al Nederlands Instituut Publieke Veiligheid (NIPV), donde se han realizado desde principios de febrero 1.175 simulaciones,llegando a las 14.784 horas simuladas. 

Además, también está presente en California, donde lo emplea la agencia forestal Cal Fire, así como las tres mayores compañías eléctricas de Estados Unidos, que lo utilizan para la prevención de incendios causados por la infraestructura eléctrica, según explica el COO de Tecnosylva. 

Blanco avanza que, antes de que finalice 2022, estará operativo en otras cinco grandes compañías eléctricas del oeste de Estados Unidos.

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A futuro, el directivo explica que están trabajando en  mejorar los modelos de predicción de los fuegos con técnicas como el machine learning o la inteligencia artificial, así como en la integración de datos de dron en tiempo real proyectados en el terreno, aprovechando las capacidades tridimensionales del simulador. 

El COO precisa que su foco son los incendios forestales, pero avanza que están en contacto con "colaboradores estratégicos expertos en otros modelos con el fin de buscar sinergias y dotar de más funcionalidades de cara a la gestión de otros riesgos del territorio".

La tecnología, clave en la gestión de emergencias

En este sentido, Pablo Herreros Arenas, responsable de cuentas de Seguridad y Emergencias en ESRI España, explica a D+I que la tecnología y, en concreto, los sistemas de información geográfica tienen "un papel muy relevante" en la gestión de las emergencias mediante el uso de herramientas como los gemelos digitales para elaborar planes de prevención y actuación. 

Herreros explica que, gracias al uso de imágenes espectrales se puede saber con antelación el estado de la vegetación para determinar si hay zonas susceptibles a incendios y adelantar cómo se comportaría en caso de que ocurriese, así como controlar las torres de vigilancia y añadir más en los puestos necesarios. 

Según recuerda, tradicionalmente, los planes de los operativos se mostraban en papel a los agentes y se quedaban desactualizados en poco tiempo, pero ahora, gracias a sistemas como ArcGIS, la coordinación se realiza en tiempo real y es posible saber dónde se encuentra exactamente cada agente e informarles de los peligros inmediatos.

"Las herramientas digitales para el conocimiento de la situación y la coordinación de equipos son hoy indispensables para cualquier cuerpo de intervención", afirma. 

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No obstante, Herreros precisa que la tecnología no solo es imprescindible en el caso de los incendios, sino también en otros fenómenos meteorológicos adversos. Por ejemplo, explica que los sistemas de información geográfica permiten la realización de modelos de inundaciones a través de las herramientas de location intelligence, teniendo en cuenta las características del terreno.

"Superponiendo en el mapa las infraestructuras, la huella de los edificios procedentes de catastro e información sociodemográfica de repositorios de datos geográficos acreditados como el Living Atlas, se puede saber qué edificios o infraestructuras quedarían afectadas, e incluso que cantidad de personas habría que evacuar en caso de una catástrofe", apunta. "Esto permite tomar medidas con antelación a que ocurra una gran emergencia y minimizar el impacto negativo".