España consolida uno de los perfiles de viajero que ya está plenamente arraigado en países vecinos como Francia, Alemania o Inglaterra. La irrupción de la pandemia por el covid-19 y el avance de la transformación digital han propiciado en este tiempo que los clientes, sobre todo aquellos con una capacidad adquisitiva medio-alta, se alejen de una oferta turística 'enlatada' sin matices ni elementos diferenciadores.

En este contexto, la startup Mint57 ha puesto en marcha todo un proceso de digitalización que permite a este nuevo usuario organizar sus experiencias beneficiándose de las nuevas herramientas tecnológicas sin olvidar el compromiso con el medio ambiente.

Su último paso ha sido la aceptación de criptomonedas como medio de pago, aunque hace ya tiempo que la agencia de viajes cierra la mayoría de sus experiencias por videollamada, sin que el cliente tenga que desplazarse.

Federica Rogantin es la fundadora y CEO de la startup Mint57.

Mint57 tuvo claro desde sus inicios en 2013 que la diferenciación basada en el personalización de la experiencia sería una de sus señas identificativas.

"Detectamos que en el mercado español no estaba cubierta la necesidad de un segmento de turista emergente: un viajero con una capacidad adquisitiva medio y medio-alta, con ganas descubrir los rincones del mundo que todavía sobreviven al turismo masivo, y hacerlo de una forma comprometida con el medio ambiente", explica Federica Rogantin, CEO de Mint57.

Myanmar, uno de los destinos que ofrece la agencia de viajes que acepta criptomonedas.

"Hasta hace muy poco tiempo se asociaban los viajes eco-sostenibles, o viajes verdes, a un turismo mochiler, para aventureros atrevidos y bohemios. Nuestra labor ha sido la de reinventar este tipo de viaje, hacerlos accesibles a un público que quiere vivir un viaje diferente sin renunciar a la comodidad", matiza la responsable.

"Nuestra oferta va desde alojamientos de eco-lujo a hoteles boutique y pequeños alojamientos rurales, todo depende la experiencia que se quiera vivir. Tenemos también viajes en pequeños grupos, con máximo 12 personas, algunos de ellos enfocadas a actividades especificas como viaje de yoga, de trekking, de buceo o gastronómicos".

La pandemia, oportunidad para innovar

Acometer un proceso de digitalización que hiciera más sencilla la contratación de sus servicios por parte de este nuevo perfil de viajero en España ya había propiciado que el 90% de los viajes de Mint57 se organicen por videoconferencia. Aceptar las criptomonedas, era el siguiente nivel en esta transformación.

"La pandemia ha supuesto un reto muy grande para toso nuestro sector, pero también ha sido una oportunidad para sacar nuevas ideas y volver a innovar, como lo hicimos cuando nacimos en 2013", explica la CEO.

"En los últimos años las criptomonedas se han vuelto una forma de pago cada vez más común. Hoy en día bitcoin, la criptomoneda más conocida, tiene más de 50 millones de usuarios y se estima que más de cinco millones de españoles tienen diferentes tipos de criptoactivos y el número está en aumento, no solo en Europa, sino también en Latinoamérica donde tenemos una parte de nuestros clientes", añade.

Con el nuevo uso de las divisas digitales, Mint57 abre ante sí un nicho de mercado aún por explorar muy acorde con los valores del proyecto. "Se trata de personas vanguardistas, innovadoras, trendsetters que encajan muy bien con nuestra oferta de viaje y nuestra filosofía eco-sostenibles". 

Pago tradicional o con divisa digital

De hecho, según explica la responsable de la agencia, muchos de los usuarios de criptomonedas "están deseando tener la posibilidad de realizar una compra pagando directamente con sus criptos, sin tener que cambiar a euro o a otra moneda FIAT. ¿Y qué mejor manera de hacerlo que disfrutando de un viaje diferente, lejos de las rutas masificadas?".

De esta forma, los clientes de Mint57 pueden seguir pagando sus viajes de la forma tradicional (con transferencia bancaria o tarjeta de crédito) o pueden optar por hacer el pago con diferentes tipos de criptomonedas (bitcoins, altcoins y stablecoins).

Su web está conectada a BitPay, una plataforma de servicio de pago en criptodivisas similar a PayPal, que admite pagos en Bitcoin (BTC), Ethereum (ETH), Bitcoin Cash (BCH), Wrapped Bitcoin (WBTC), Dogecoin (DOGE), Litecoin (LTC) y 5 stablecoins vinculadas al dólar estadounidense: GUSD, USDC, USDP, DAI y BUSD.

"En este caso el sistema indicará la cantidad a pagar en euros y el cliente solo tendrá que seleccionar la moneda elegida que será enviada directamente a la cartera de Mint57", asevera la CEO.

Las propuestas vacacionales de Mint57 van dirigidas a un cliente que huye del turismo masificado y sin personalizar.

En el caso de que el cliente prefiera hacer un pago directo desde tu monedero virtual, se aceptan muchas otras altcoins: ADA, LINK, DOT, EOS, LTC etc. "En este caso le enviaremos la dirección de nuestro monedero virtual y le asistiremos en la realización de la transacción, que es muy sencilla".

"En ambos casos la seguridad en las operaciones está asegurada, ya que funciona con el sistema blockchain, un sistema inequívoco e incorruptible", matiza.

Por otra parte, Mint57 no sólo es una de las primeras agencias de viaje del mundo que ha ofrecido a sus clientes un amplio abanico de pagos, incluyendo también las monedas digitales, sino que facilita la organización de las vacaciones al detalle sin desplazarse de su casa.

"A cada cliente se asigna un personal traveler. Investigamos y probamos el mejor producto, escuchamos a nuestros clientes y diseñamos a medida su plan viajero. No tenemos intermediarios, trabajamos directamente con receptivos locales, hecho que nos permite tener una atención más rápida, personalizada y muy competitiva".

Además, desde nuestro nacimiento ha concebido el turismo sostenible como parte integrante del proyecto. "Apoyamos proyectos locales, participamos en planes de conservación ambiental, somos cofundadoras de la asociación de voluntariado ambiental Blua, trabajamos de la mano con Faada para un turismo responsable con los animales", apostilla Federica Rogantin.