Fue en abril de 2022 cuando, en la inauguración del evento Wake Up, Spain!, organizado por El Español, Invertia y D+I, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunciaba este ambicioso plan centrado en la microelectrónica y los semiconductores.

Tan sólo unos meses antes, en noviembre de 2021 nacía en España la Asociación Española de la Industria de los Semiconductores (AESEMI), con la vocación de construir, a partir del talento que ya existe en nuestro país, toda la cadena de valor de este estratégico sector del que dependen industrias fundamentales para la Unión Europea.

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"El objetivo de nuestra asociación es dar visibilidad a todas las empresas que forman parte del ecosistema tecnológico de los semiconductores en España", explica a D+I Danny Moreno, presidente de esta asociación que echó a andar de la mano de cuatro industrias -Wiyo, Imasenic, Kdpof y IC Málaga- y que aglutina en la actualidad a 19, además de tres universidades.

Y su músculo empresarial y de talento no para de crecer. Otras cuatro empresas y seis universidades están cerrando el proceso para pertenecer a AESEMI.

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"En España tenemos el talento necesario para desarrollar chips, pero no lo hemos hecho fluir hacia las empresas privadas. En las universidades hay miles y miles de desarrollos que se han quedado en allí. Nuestra labor va encamina a fortalecer el ecosistema", añade Moreno.

¿Cuáles son los orígenes de AESEMI y cuál es su principal objetivo?

Quería registrarme como empresa del sector de semiconductores (Danny Moreno es CEO de Wiyo (Yocto Tecnologies) en una asociación y no encontré ninguna aquí en España. 

Entonces pensé que si no existía, había que crearla. Hablé con nuestros abogados, preparamos los documentos y junto a tres empresas españolas de semiconductores -Imasenic, Kdpof y IC Málaga- fundamos AESEMI.

Al principio preferimos que las fundadoras fueran españolas, para luego ir incorporando firmas internacionales como estamos haciendo en la actualidad.

Registramos la asociación en noviembre de 2021 y, pese a ser una asociación bastante joven, hemos tenido mucho éxito en expandirnos rápidamente y en representar a la industria de semiconductores en España.

El presidente de AESEMI, Danny Moreno (tercero por la izquierda), y el gerente de la asociación, Alfonso Gabarrón (cuarto por la izquierda), en un reciente evento en la Embajada de Bélgica.

La creamos porque realmente es muy difícil manejar una empresa de semiconductores solo en un desierto. El ecosistema es muy importante y al unirnos nos apoyamos, buscamos que nuestro entorno de semiconductores se fortalezca para que esa semilla que sirve para todas las tecnologías sea fuerte y fluida.

¿Cómo recibieron el anuncio del PERTE Chip y qué valoración hacen de este plan para impulsar la industria de semiconductores en España?

Lo recibimos satisfactoriamente. Creemos que llega bastante a tiempo porque para que la industria de semiconductores llegue a la industria y la fortalezca, hace falta el ecosistema pero también financiarlo, y el Gobierno tiene que ayudar. En ningún país ha sucedido que eso venga de la empresa privada.

Creamos la asociación porque es muy difícil manejar una empresa de semiconductores solo en un desierto. El ecosistema es muy importante y, al unirnos, fortalecemos todo el entorno

Las empresas ponen su infraestructura, conocimiento y experiencia, pero la financiación al principio tiene que venir del Gobierno. Después, poco a poco, cuando la industria esté fortalecida podrá autofinanciarse.

Hemos apoyado desde AESEMI el PERTE Chip y estamos en continua comunicación con el Gobierno. Creemos que haciéndolo bien, con una buena estrategia para que esa iniciativa continúe en el tiempo, vamos a tener éxito y podremos crear esa tecnología de semiconductores significativa a nivel mundial en España.

(PERTE Chip) Haciéndolo bien y manteniendo la iniciativa en el tiempo podremos crear una tecnología española de semiconductores significativa

¿Cuáles son los puntos fuertes y las debilidades de nuestro país en la industria de los semiconductores?

España está en una buena posición a nivel de diseño y desarrollo de semiconductores. Hay muchas empresas internacionales que vienen a España para aprovechar el talento que existe atraídas por la calidad de vida de este país, y muchos de sus empleados están trabajando para ellas desde aquí.

Por otra parte, las empresas españolas también estamos contribuyendo a ese diseño y desarrollo y hay muchísimo talento español que está fuera de este país en busca de mejoras, y la intención de la asociación también es buscar ese talento y traerlo.

Lo que no tenemos son fábricas de semiconductores como lo hay en Taiwán, Corea, Alemania, Francia, Reino Unido...

Una fábrica de semiconductores requiere mucha tecnología y experiencia. Sería un error hacerlo desde cero en España, hay que aliarse con empresas internacionales

Querríamos tenerlo también aquí, sobre todo en la parte de la integración con los semiconductores. Es decir, fortalecer todo el ecosistema desde el diseño hasta la producción. Por otra parte, tenemos que mejorar la relación y la fluidez de la información desde la universidad hacia la industria. 

¿Dónde se sitúa España en este sector a escala global y hacia dónde debería evolucionar su estrategia?

Una fábrica de semiconductores requiere mucha tecnología y experiencia. Sería un error hacerlo desde cero en España. Lo correcto es aliarse con empresas que ya están a nivel internacional, atraerlas a nuestro país y aliarse con la industria española, con el apoyo del Gobierno, para que no solo sea producción sino que tenga tracción hacia el mercado.

Esto toma tiempo, las empresas internacionales cada una tiene sus intereses; hasta ahora no habían tomado en cuenta a España como posible ubicación de sus fábricas, se nos habían adelantado obviamente otros países que desde hace tiempo ya tienen el ecosistema que ahora nosotros perseguimos, como Alemania, Francia, incluso Italia está por delante.

Estas empresas internacionales no habían tomado en cuenta a España como posible ubicación de sus fábricas, se nos habían adelantado otros países

Entonces, eso se está creando ahora, se está conversando ahora con empresas y hay que darle un poco más de tiempo para que aterrice y se tomen las decisiones correctas, a sabiendas que en España la tracción del talento es mucho más eficiente y contundente, económico y especializado.

Y el deseo de todas las universidades, de todos los institutos tecnológicos, de fortalecer y crear talento es una iniciativa ya tomada.

¿Cuál es la prioridad para 2023 desde la asociación?

Lo más importante es que las marcas sean españolas. Que el diseño sea hecho en España. Hay una diferencia muy grande entre 'hecho' y el 'diseño' del semiconductor. Fortalecer el diseño con propiedad intelectual española es importante porque eso nos diferencia para competir a nivel internacional.

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Hasta ahora China ha sido la fábrica del mundo, pero ellos ya quieren escalar el 'diseñado en China', no solo el 'fabricado en China', porque todos mandábamos los diseños a China y ellos nos lo fabricaban. Esto ha cambiado y ellos también aspiran a diseñar. El diseño es el que da la marca. 

Por esto, lo crucial es que sea 'creado y diseñado en España'. Lo otro, la fabricación, también lo es, porque no podemos dejar nuestra autonomía de semiconductores en manos de unos pocos países que, además, políticamente son inestables. Por lo tanto, tenemos que tener fábricas para no ser tan dependientes.

Fortalecer el diseño con propiedad intelectual española es importante; tenemos el talento, pero no ha fluido a la empresa. En las universidades hay miles y miles de desarrollos en semiconductores

¿Es el talento nuestra principal baza como país para posicionarnos en esta industria tan tecnológica?

Sí, tenemos empresas que desarrollan y diseñan chips con un talento de primera línea, pero no estamos al nivel de los países tecnológicamente más desarrollados, EEUU, Alemania, Francia, Israel, Taiwan, Corea...

Pero lo importante es que sí tenemos el talento que desarrolla esos semiconductores, pero no lo hemos hecho fluir hacia las empresas privadas. En las universidades hay miles y miles de desarrollos que se han quedado en allí. Es espectacular lo que crean nuestras universidades en semiconductores.

Pero no llegan a la industria. Desde la asociación estamos esforzándonos por alinear a las empresas privadas con las universidades y el resto de instituciones para llevar todo ese talento a la industria.