Aleida y Rodrigo, en el Talent House, su hogar desde hace unos meses en San Sebastián.

Aleida y Rodrigo, en el Talent House, su hogar desde hace unos meses en San Sebastián.

País Vasco - Euskadi

Talent House o cómo evitar el 'aterrizaje forzoso' de un investigador extranjero: la historia de Aleida y Rodrigo

D+I se cita con dos de los científicos alojados en este edificio de apartamentos de Donostia, destinado a 'proteger' el talento foráneo. "Ayuda a que estés centrado en lo importante: investigar", dicen.

30 diciembre, 2021 03:30
San Sebastián (País Vasco)

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El taxi encara una imponente rampa que hace presagiar que la vista de San Sebastián será espectacular. Pero, al llegar a nuestro destino, lo primero que llama la atención es el propio edificio. A simple vista, podríamos pensar que es un centro de mayores, un hotel de lujo o incluso un inmueble destinado a oficinas.

De hecho, estas son algunas de las utilidades que se le podía haber dado a esta parcela hace una década, pero el Ayuntamiento donostiarra, a través de la sociedad pública Fomento de San Sebastián, decidió apostar por un proyecto disruptor -que muy pocos alcaldes se habrían atrevido a acometer en plena crisis económica-: construir un edificio de apartamentos para dar cobijo al talento extranjero que viniera a ejercer la investigación a la ciudad.

Estamos en el Talent House, en una recta final de año marcada por el incremento de incidencia de la dichosa Covid. Allí hemos quedado con Aleida Sandoval y Rodrigo Aguilera, dos investigadores latinoamericanos que trabajan cada día por y para la ciencia y que gracias a esta iniciativa pública de alojamiento evitaron un aterrizaje forzoso en su nueva ciudad.

Aleida y Roberto nos esperan en la azotea y los saludos, fríos debido a las precauciones pandémicas, se mezclan con nuestra cara de asombro al confirmar lo que suponíamos. Las vistas son de ensueño y no hay más que echar un vistazo a la imagen que acompaña este artículo.

Ella es venezolana y doctora en Ingeniería y Ciencia de los Alimentos. Ya estuvo viviendo en el Talent House durante tres meses y volvió el pasado mes de abril para cubrir un proyecto que acaba este mes.

El Talent House de San Sebastián.

El Talent House de San Sebastián.

Él es mexicano e investigador del Donostia International Physics Center. Llegó en mayo y su estancia durará dos años. Su intención es pasar esos dos años en este alojamiento. "En teoría el tiempo máximo es de un año, pero he oído que si los contratos son de dos años, como el mío, puede haber prórrogas", explica.

Hechas las presentaciones, superada la obnubilación y dejando al margen los temas burocráticos, pronto surge en la conversación el verdadero motivo por el que el Talent House es una referencia.

"Desde el primer momento en el que me hablaron de este edificio te das cuenta de que la comunicación fluye, de que todo es muy fácil. El engranaje en la tramitación es perfecto y todo se puede arreglar desde casa, antes de tu llegada a la ciudad", remarca Aleida.

La consecuencia inevitable de lo anterior para esta experta en biopolímeros es que "cuando uno llega a su nueva ciudad lo hace de una forma tan natural que es como si llegaras a tu casa".  

Rodrigo asiente: "Normalmente cuando inicias un proyecto en una ciudad nueva necesitas llegar una semana antes, hospedarte en un hotel mientras buscas tu nuevo hogar… En mi caso, aterricé en fin de semana y mi nueva casa ya tenía luz, internet, gas y todo listo". Aleida sonríe: "Yo, al día siguiente de llegar, ya tenía una presentación".

En resumen, "un lugar como el Talent House hace que te centres desde el minuto uno en lo más importante, investigar, trabajar por la ciencia".

Comienza la obra del Talent House 2

Por no hablar de los precios. "Mi Plan A siempre fue el Talent House pero hice una búsqueda previa en otro tipo de alojamientos más convencionales y me sorprendió los precios que se piden", explica Rodrigo.

La relación calidad del servicio-ubicación-precio "es fantástica y perfectamente asumible", coinciden ambos.

Todo lo anterior es precisamente lo que buscaba Fomento de San Sebastián y eso es lo que le ha movido a iniciar el Talent House 2.

El responsable de Innovación y Competitividad de esta sociedad pública, Íñigo Olaizola, revela que la obra del nuevo edificio ya está en marcha y se espera que esté concluido en 2023. Y admite que, con respecto a su hermano mayor, el Talent House, tiene algunos hitos diferenciales.

En primer lugar, "la apuesta es por ubicarnos en centro de ciudad, a 150 metros de la playa de la Concha y en pleno corazón urbano, para hacernos más visibles a la ciudadanía y generar un espacio vivo, abierto y dinámico, aproximando la innovación y la apuesta de la ciudad por ella a los propios ciudadanos y agentes".

Pero el principal hecho diferencial será el target al que irá dirigido: de los investigadores del Talent House al ecosistema emprendedor del Talent House 2.

"Normalmente cuando inicias un proyecto fuera de tu país necesitas una semana en un hotel mientras buscas alojamiento. Aquí vienes con todo arreglado".

"La apuesta es por configurar un espacio que permita aumentar la atractividad de Donostia para ese talento profesional y emprendedor, para lo cual se habilitaran tanto apartamentos para facilitar la llegada con espacios de apoyo a proyectos emprendedores, como nuevos programas y colaboraciones que hagan de este espacio en centro ciudad una punta de lanza para la apuesta emprendedora de San Sebastián", detalla Olaizola.

Y resume: "Buscamos configurar un espacio y una estrategia que permita alojar y dar espacio a agentes de toda la cadena de valor para el impulso del emprendimiento".

Cualquier esfuerzo es poco. De hecho, el presupuesto se ha incrementado ligeramente con respecto al que estaba inicialmente previsto y se sitúa en torno a los 9 millones de euros. Esta cantidad será asumida íntegramente por la sociedad pública en una operación de alquiler con derecho a compra.

Este nuevo Talent House sumará 73 nuevos apartamentos a los ya actuales 80 apartamentos del Talent House original. Esto configurará una unidad de negocio con 153 apartamentos de diferentes dimensiones, desde apartamentos individuales y dobles hasta apartamentos familiares.

En el caso de este segundo edificio las dimensiones oscilarán entre los 25 y los 50 metros cuadrados y principalmente estarán destinados a unidades individuales y dobles, para estancias un poco más cortas que el edificio pionero.

"El carácter de las estancias es rotatorio y pretende orientarse tanto a la demanda no atendida de investigadores del Talent House (entre 50 y 70 peticiones deben ser desestimadas anualmente por falta de espacio, también por no cumplir requisitos), pero también a profesionales cualificados atraídos a empresas innovadoras locales, como también a perfiles emprendedores de todo el mundo, tanto si vienen solos como con sus familiares", argumenta.

San Sebastián, reconocida en ciencia

Volviendo a nuestra conversación en el Talent House pionero con Aleida y Rodrigo, nos cuentan que ellos han venido solos y "estamos concentrados únicamente en nuestro trabajo", pero reconocen que por casos que conocen este edificio es algo más que un alojamiento.

"Una colega de Venezuela vino con su pareja y desde aquí (el Talent House) se le ayudó a encontrar actividades o incluso un empleo", admite Aleida.

El Talent House es una especie de comunidad científica formada por "personas que tenemos el mismo nivel académico y los mismos intereses y eso nos da un clima especial de tranquilidad".

Hasta el punto de que "una vez se me estropeó la puerta del apartamento y tuve que dejarla abierta porque tenía una reunión inaplazable", cuenta como anécdota Aleida, que se siente "una privilegiada por vivir aquí e investigar en San Sebastián".

La ciudad ya está en el mapa mundial de la investigación. Y no es algo que digan los eslóganes del Ayuntamiento o de los centros de investigación. Lo constatan los propios investigadores.

Rodrigo confiesa que "en el caso de la física, la ciudad sí que es muy reconocida a nivel internacional porque aquí viene gente de todo el mundo. Hablo con mis amigos en Chile, México o Argentina y no tengo que explicarles nada, saben dónde estoy, y ya no solo por la gastronomía sino por su potencial científico e investigador".

Una vez ya en la ciudad y en el Talent House, la relación con los vecinos de pasillo hace el resto. La transferencia de conocimiento, que aún podría ser mayor si estuvieran habilitados los espacios de coworking y de descanso del edificio -cerrados por la Covid-, fluye sin descanso entre investigadores y retroalimenta el potencial de San Sebastián y su posicionamiento a nivel científico mundial.

Detrás de estas historias personales, no nos olvidemos, hay brillantes carreras e importantes descubrimientos. La ciudad, "muy hospitalaria", lo único que pretende es dar cobijo a ese talento y evitarle obstáculos para seguir dibujando un futuro tan brillante como la vista que asoma desde la azotea del Talent House.