La energía eléctrica puede ser fácilmente generada, transportada y transformada. Sin embargo, hasta ahora no se ha logrado almacenar de forma masiva y económica.

Solo las baterías de litio presentan eficiencias por encima del 85%, aunque siguen ofreciendo esperanzas de vida limitadas a máximo 1.000 ciclos de carga y suponen un impacto negativo en el medio ambiente debido a que su proceso de extracción es altamente contaminante y extensivo en recursos.

Por ello, uno de los cuatro retos que Sacyr ha lanzado en Sacyr iChallenges busca soluciones para maximizar el uso de energía renovable. Para ello apela al ecosistema innovador para aumentar la capacidad de generación, almacenamiento y aprovechamiento de energía renovable en sus instalaciones, al mismo tiempo que reduce la factura energética.

Los innovadores interesados tienen hasta el 15 de julio para presentar sus ideas. El objetivo: conseguir una descarbonización en cada una de las siguientes fases del ciclo de la energía:

"El mundo cada día cambia más rápido, por eso, nos tenemos que adaptar a las necesidades de nuestros clientes. La innovación, la creatividad y el talento están en cualquier parte", explica Eva Jalón, directora de Sacyr Agua.

"En Sacyr estamos comprometidos tanto con la generación como con la utilización de las energías renovables. Pero tenemos un reto: su almacenamiento", subraya Eva Jalón.