Si hace una década nos hubiéramos paseado por las calles de Barcelona y hubiésemos explicado a cualquier de los viandantes que Seat tiene un servicio de motocicletas y patinetes con el que puedes desplazarte por la Ciudad Condal, seguramente nos habrían tomado por una cámara oculta. 

Lucas Casasnovas, director de Seat Mo, el nuevo servicio de movilidad urbana de la marca española, es uno de los principales culpables de que una compañía originalmente centrada en la fabricación de coches se haya lanzado a ofrecer un servicio con el que persigue ampliar tanto sus capacidades de generar negocio como su base de clientes.   

De la mano de Casasnovas repasamos el reto que supone lanzar un nuevo servicio de movilidad urbana para una marca como Seat en un contexto aún fuertemente marcado por la crisis del coronavirus. 

¿En qué momento una empresa como Seat decide que tiene que poner en marcha un servicio de movilidad urbana?

Estos cambios de tendencia no se dan de un día para otro. Hace unos años decidimos realizar un análisis detallado de cómo había evolucionado nuestro mercado durante la última década. Gracias a este estudio nos dimos cuenta de varias cuestiones. La primera, es que nuestros clientes eran 10 años más jóvenes que la media de otras marcas europeas. Además, también vivían más en ciudades. 

Como segunda conclusión entendimos que los salarios de la gente joven no habían evolucionado entre 2008 y 2018, con sueldos muy estancados en 1.000 euros. En cambio, el precio de los coches se fue incrementando en ese tiempo debido a la evolución tecnológica. Antes con 18 años la mayoría de la gente se sacaba el carné y se compraba un coche. Ahora el acceso de los jóvenes a la compra de un coche se dificulta hasta el punto de que los menores de 35 años que se sacan el carné de conducir han bajado en un 50%. 

El público natural de Seat estaba viviendo una reducción en su interés por comprar coches. Para compensar esto decimos lanzar otras soluciones de movilidad que se ajustaran más a su realidad. Los jóvenes se siguen queriendo mover y necesitan soluciones de movilidad. Por esto Seat apuesta en una nueva movilidad basada en servicios de micromovilidad como patinetes o motos. 

¿Qué lugar quiere ocupar Seat Mó en la movilidad de las ciudades?

Nosotros creemos en la multimovilidad. En la ciudad hay muchas necesidades y muy diferentes. Hemos visto que como cambio de tendencia un aumento en el deseo de incrementar la movilidad individual por culpa de la pandemia. Cuando se normalice la situación esperamos que esto cambie ya que el transporte público volverá a ser la opción preferida para millones de personas. Pero nuestro papel seguirá como servicio complementario en eso que se denomina la última milla. 

El transporte público está recuperando su actividad a un ritmo menor que el coche, ¿es sostenible esto en el tiempo?

El transporte público sigue siendo fundamental. Además, tiene una gran oportunidad para aprovecharse de todas las posibilidades que nos abre la tecnología. Igual que el motosharing ofrece unas posibilidades de flexibilidad tremenda, podemos ver ejemplos de un aumento de esta flexibilidad en el transporte público. Opciones que se adapten más a la demanda real que hay en la calle. 

¿Cómo valoran los primeros meses de Seat Mó?

Estamos muy contentos con la aceptación de la apuesta de Seat por la micromovilidad. El proyecto piloto de Barcelona está dando muy buenos resultados. La segunda ola de la covid no ha afectado al servicio. La gente sigue usando nuestros servicios. Las perspectivas para año que viene son muy buenas lo que abre las puertas a que vayamos a más ciudades. 

Cada vez vemos más peso en la industria del programa frente al hardware, ¿esta tendencia se va a agudizar?

Te diría que ambas dimensiones son igual de importantes. El mejor ejemplo lo tenemos en Apple que desarrolla tanto el sistema operativo, como el dispositivo e incluso los chips. Lo ideal es tener control de toda la cadena de valor. Definir en función de lo que sabemos que los clientes necesitan. Nos gusta tener tanto los productos como los servicios. El valor está en maximizar el valor que podamos dar a nuestros clientes que son tanto los que compran como los que usan. 

Existen planes a nivel estatal y comunitario que van a tener un impacto muy importante en la forma en la que nos movemos tanto dentro como fuera de las ciudades, ¿cómo se imagina que será la movilidad del futuro?

De cara a 2040 hay una cosa muy clara: a partir de este año todos los vehículos que se vendan en Europa tienen que ser eléctricos. Cuando esto llegue veremos una ciudad sin humos y sin ruidos, escucharemos el silencio. Desaparecerán esos episodios de congestión las reducciones de movilidad por contaminación...

Ahora, hasta esos 20 años vamos a estar en una transición. Los gobiernos incentivarán esta movilidad eléctrica y se van a consolidar las opciones de micromovilidad que reducirán la congestión de las ciudades. Estas soluciones van a consolidarse en los próximos cinco años. 

Donde hoy tenemos coche y transporte público, veremos un cambio en el mix de la movilidad donde tendrán un papel importante soluciones como los patinetes, las motos, bicicletas todo totalmente eléctrico.  

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