Sánchez dice que España "lidera la recuperación" y Casado lo ve al revés: "Ha destruido la economía"

El presidente del Partido Popular, Pablo Casado, no comparte el balance optimista de la situación económica y sanitaria desplegado este jueves por el presidente del Gobierno en La Moncloa, donde ha defendido que España "lidera la recuperación económica" de la eurozona.

Y es que si Pedro Sánchez presume de que el país es "medalla de oro en vacunación" y "líder en recuperación económica", el líder de la oposición considera que acaso somos "medalla de oro en destrucción de la economía nacional, medalla de plata en mortalidad por Covid en relación a la población que tenemos y medalla de bronce en destrucción de empleo y creación de desigualdad".

Todo ha comenzado con la presentación del primer informe de rendición de cuentas de 2021. Con el pretexto de hacer balance del curso, Sánchez ha proferido un discurso muy optimista sobre el futuro del país, asegurando que su objetivo es "no dejar a nadie atrás".

Así lo refleja también el documento Cumpliendo, que presume de la acción del Gobierno por cuanto "ha seguido protegiendo el empleo a través de los ERTEs", ha "prorrogado y mejorado los mecanismos que garantizan la suficiencia de recursos de las familias y la protección de los colectivos que más lo precisan" o "ha ampliado la protección del derecho a la vivienda".

Un "triunfalismo" que no comparte el presidente del Partido Popular, que ha comparecido inmediatamente después para censurar el "balance absolutamente ficticio" exhibido por Sánchez, del que no se puede extraer una rendición de cuentas como sí podría efectuarse parlamentariamente en un Debate sobre el Estado de la Nación que el jefe del Ejecutivo "evita".

"Lo de hoy ha sido bochornoso", ha aseverado Casado, que en una enmienda a la totalidad al discurso del presidente del Gobierno, ha calificado de "sketch" y "monólogo del club de la comedia" regado con "PowerPoints trucados".

"Seis crisis"

Para el líder del PP, España está inmersa en seis crisis a las que el Gobierno no está sabiendo dar solución. Una crisis sanitaria que ha estado marcada por la "ocultación de datos", la "imprevisión" para la compra de material y "un estado de excepción encubierto" que ha tumbado el Tribunal Constitucional.

Casado se ha referido también a la "crisis institucional". Ahí asegura que desde el Gobierno se ha atacado a "la Monarquía, la Transición y la Constitución". También ha recordado que ha habido "purgas" en la Guardia Civil y la Policía Nacional.

La tercera crisis detectada por los populares atañe a la política exterior. En este punto Casado ha hablado de la "alianza con dictaduras comunistas", como Venezuela, y a la torpeza demostrada en la crisis con Marruecos.

El presidente del PP ha puesto énfasis también en la "crisis territorial", por la "degradación del Estado autonómico". "Empezaron hablando de plurinacionalidad; después, de nación de naciones; luego, de confederación; y ahora, de España multinivel, que es un insulto a la igualdad de todos los españoles", ha asegurado. En este punto, Casado ha dicho que Sánchez es "rehén de los nacionalistas".

Casado ha mencionado una quinta crisis, la "social". Sus datos difieren del discurso optimista de Sánchez. Puso énfasis en recordar los "dos millones de personas en las colas del hambre", "un millón de familias con todos sus miembros en paro" y "cuatro millones de parados". Y se refirió a la situación especialmente difícil de los jóvenes, "el 60% no puede emanciparse y el 38% está en paro y está pensando en emigrar".

La sexta crisis para Casado es la económica. "¿De qué presume este Gobierno", se ha preguntado, después de asegurar que el Gobierno debería asumir que hemos sido "rescatados por el Banco Central Europeo" y que eso entraña el riesgo del "default" si el mercado cambia las condiciones de la deuda.

El líder de la oposición ha acusado también al Gobierno de preparar un "infierno fiscal". "Si mantienen el gasto, ¿cómo van a cumplir la reducción comprometida de déficit? ¿Qué esconden?", ha apuntado. Según Casado es imposible que España pase de un déficit del 11% en 2020 al 5% en 2022, seis puntos en dos años, sin una subida de impuestos a la clase media.

Lo cierto es que Bruselas, en sus últimas estimaciones, prevé que España -junto a Rumanía, Irlanda y Hungría- sea uno de los países que más crezca este año (un 6,2%), pero también es verdad que será uno de los últimos en recuperar su nivel previo a la crisis derivada de la pandemia. No lo conseguirá hasta el tercer trimestre de 2022, un año más tarde que la media de la UE. Ni tanto ni tan poco.