Cuando se acercaron las elecciones del 28 de abril, lo que desde el resto de España conocíamos como las Mareas -esa amalgama de agrupaciones, partidos, espacios políticos, confluencias y coaliciones- por fin aclararon el panorama. Pablo Iglesias ganaba la guerra de los cabezas de lista -Yolanda Díaz, por Pontevedra; Antón Gómez-Reino, por La Coruña- y Luis Villares vencía en la de la marca: "En Marea", la nomenclatura del partido instrumental, estaba a su nombre en el registro, así que se lo quedó y la prensa pudo hacer titulares de "ruptura de la confluencia gallega".

No era del todo cierto, pero tampoco una mentira. El caso es que la lista de Galicia En Común multiplicó por 13 los apoyos de En Marea en las urnas -14,49% frente al 1,08% en las cuatro provincias- y quedó claro que Iglesias había logrado domar el convulso panorama de la izquierda radical gallega.

Pero sigue quedando la marca, muy conocida y con titulares asegurados: "Errejón le roba las Mareas a Iglesias y logra implantación en Galicia"... cosas así. Aunque Luis Villares ya ha ofrecido el poder de convocatoria de En Marea en busca de un acuerdo y, de hecho, han comenzado los contactos, la operación Errejón va más allá.

Errejón empieza a crear alianzas de cara a las elecciones generales.

Según ha podido saber este periódico, el proyecto del que este miércoles se confirmará como candidato a la Presidencia del Gobierno se encamina a que en su foto haya más fundadores de Podemos que en la de Pablo Iglesias. Ya colocó a Luis Alegre en el puesto de cierre de su lista a las primarias de Más Madrid para las elecciones autonómicas. Y ahora, la apuesta de los dirigentes para liderar sus carteles en Galicia es Carolina Bescansa.

A Iglesias sólo le queda el fiel Juan Carlos Monedero, en todo caso retirado oficialmente de la actividad política desde su affaire con Hacienda y la elusión fiscal de sus informes fantasma para el Gobierno chavista de Venezuela. Errejón, Alegre y Bescansa ya se han ido. Y ahora la socióloga puede ser la pata que necesita el examigo del líder de Podemos para ampliar la implantación territorial del proyecto Más País, nombre provisional de la plataforma.

Carolina Bescansa, Luis Alegre, Juan Carlos Monedero, Pablo Iglesias e Íñigo Errejón, los fundadores de Podemos, en Vistalegre I.

Un portavoz oficial de Errejón aclaraba a este periódico que "el equipo de negociadores está avanzando poco a poco en las alianzas territoriales" y que el nombre de Bescansa "no sólo suena en los medios, también está en los debates internos", pero se negaba a dar más detalles "hasta el cierre de esta semana". La propia interesada ha preferido no hacer declaraciones "hasta la semana que viene".

Las fechas encajan: este domingo 29 de septiembre se cierra el plazo de presentación de candidaturas para las coaliciones ante la Junta Electoral Central.

"No está retirada de la política"

Las mismas fuentes citadas explicaban que, aunque "Bescansa e Íñigo no han sido siempre aliados", su nombre encaja perfectamente en el proyecto. Además, recuerdan que "Bescansa no está retirada de la política" y que, de hecho, ya trató de reengancharse al proyecto de Podemos tras ser apartada del núcleo de poder por Iglesias compitiendo en las primarias de Galicia en octubre de 2018, cuando Iglesias y ella ya llevaban seis meses sin hablarse.

En abril se había filtrado un documento en el que supuestamente, Bescansa ofrecía a Errejón un intercambio de apoyos para acabar con el liderazgo de Iglesias en Podemos. El hoy líder de Más Madrid se desmarcó del asunto e incluso, al poco, acabó retirando su oferta a la socióloga para que lo acompañara como número dos en la lista a la Comunidad de Madridcementerio al que le había mandado el secretario general tras derrotarlo en el Vistalegre II.

Carolina Bescansa, finalmente, perdió las primarias gallegas de Podemos el 25 de octubre frente a Antón Gómez-Reino y decidió volver a su vida universitaria y a sus estudios de sociología demoscópica. Pero la retirada táctica esperaba la oportunidad que ahora se le presenta: volver a trabajar por el proyecto de "unión de la izquierda" que siempre dijo defender.

No en vano ella se había retirado de la Ejecutiva morada por voluntad propia cuando empezó la guerra submarina entre errejonistaspablistas. Y empezó a saber que no pintaba mucho junto a Iglesias después del 1-O separatista en Cataluña, cuando pidió en público a Iglesias que "hablara más a España y a los españoles y no sólo a los independentistas".

Avances en Aragón

Por otro lado, y después del acuerdo sellado con Compromís y los avances en Galicia, la operación Errejón sigue avanzando por otros territorios. Y su acercamiento a la Chunta Aragonesista (CHA) promete tener éxito. El pasado lunes, su Ejecutiva decidía presentarse a las elecciones del 10-N, en contra de la decisión tomada para las de abril. "Entonces, propusimos un acuerdo a Podemos y PSOE para ir en listas conjuntas y ambos lo rechazaron", explican fuentes de la dirección.

"Como era un momento excepcional, la CHA decidió no postular listas y apostar por el acuerdo a nivel nacional de esas dos fuerzas", explica una portavoz. El fracaso de las negociaciones entre Sánchez e Iglesias hizo sentir que el voto fue "desperdiciado" y ahora los nacionalistas aragoneses sí se presentarán. Falta saber si en solitario o si, "mejor en confluencia", con Podemos o Más Madrid.

José Luis Soro (CHA), Javier Lambán (PSOE), Nacho Escartín (Podemos) y Arturo Aliaga (PAR), en la firma del acuerdod e Gobierno para Aragón. Efe

Y Errejón lleva ventaja. Porque, aunque los de José Luis Soro son socios de los morados en el Gobierno regional del socialista Javier Lambán, en el seno de la formación aragonesa se considera que Podemos ha formado parte del problema que nos ha llevado a la repetición electoral. Un argumento casi calcado del esgrimido este martes por Joan Baldoví, diputado de Compromís, para justificar su adiós a los morados y su confluencia con Más Madrid.

Según han confirmado a EL ESPAÑOL fuentes oficiales de la Chunta, el partido ya ha mantenido contactos con Podemos y con los emisarios de Errejón. "Nos llamaron ambos este lunes", detallan, "y por ahora sólo hemos escuchado qué nos quieren ofrecer". Los contactos continuarán a lo largo de esta semana y la decisión definitiva se tomará en el Comité Nacional convocado para este viernes a las 19.00 horas.

Las bases de Compromís lo confirman

La militancia de Compromís ha ratificado con un 70% que la coalición concurra en las elecciones generales del 10 de noviembre en una plataforma "amplia y plural" con el partido de Íñigo Errejón, y otras fuerzas políticas del Estado. En la consulta ha participado el 42,2% de la militancia.

Según ha informado la coalición en un comunicado, de esta forma, la militancia ha ratificado la decisión que adoptó el pasado lunes la Comisión Ejecutiva de concurrir a los próximos comicios "en una plataforma amplia y plural con Más Madrid y otras fuerzas políticas similares del Estado".

A favor de la propuesta de la Comisión Ejecutiva se ha pronunciado el 70% de la militancia (1.676 votos); en contra el 27% (639) y se ha abstenido el 3% de los participantes, es decir, 77 personas. La consulta ha estado abierta desde este martes a las 12.00 horas hasta este miércoles a la misma hora, y ha contabilizado la participación de 2.392 personas, lo que supone el 42,2% de la militancia de la coalición.

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