Manuel Valls carga de nuevo contra Vox y censura su entrada en la Mesa del Parlamento de Andalucía, facilitada por el pacto de Gobierno entre PP y Cs. El candidato independiente a la Alcaldía de Barcelona ha lamentado la "irrupción de la ultraderecha en las instituciones", a través de un comunicado: "A pesar de que responde al resultado de las urnas, es una mala noticia para España y para Europa en su conjunto.

Para Valls, que se ha convertido en azote de Vox, "urge más que nunca contar con líderes y políticas capaces de frenar a los radicales". Para ello, el exprimer ministro francés ha reclamado la abstención del PSOE de Susana Díaz para que PP y Cs puedan gobernar sin el incómodo apoyo de los populistas de derechas. "Evitaría así suscitar sospechas de que con su oposición hace el juego a la extrema derecha", ha deslizado para argumentar su posición.  

En paralelo, ha defendido el acuerdo de Gobierno entre Juan Marín y Juanma Moreno subrayando que el texto "lleva claramente la marca progresista de Ciudadanos" y "no tiene nada que ver con las propuestas de Vox y podría perfectamente recibir el apoyo de la izquierda moderada".

Además de reclamar de nuevo el apoyo de los socialistas, Valls mantiene que cualquier atisbo de acuerdo programático que incluya a Vox sería "un error político y una incongruencia moral".

El exprimer ministro galo termina el comunicado con una reflexión: "Siempre es mejor perder votos, o incluso el gobierno, que traicionar las propias convicciones y los valores democráticos".