Virginia Pérez, la candidata a presidir el PP de Sevilla afín a Génova, ha arrasado en la primera parte del XV congreso provincial del partido en la capital de Andalucía y la suya será la única candidatura. El cónclave se celebrará el próximo sábado 27 de marzo.
Los datos aún son provisionales, pero Pérez consiguió en esta primera vuelta un 22,6% más de votos. Obtuvo 1.176 y el otro candidato, Juan Ávila, afín al presidente de la Junta, Juanma Moreno, 742. Los estatutos del partido marcan que si un candidato obtiene un 15% pasará en solitario, pero los tambores de guerra que venían sonando semanas atrás lo seguirán haciendo.
Juan Ávila, también alcalde de Carmona, recurrirá "ante todas las instancias el fraude histórico" del XV congreso provincial extraordinario del partido y ha avisado de "avalancha de denuncias" de afiliados que "no han podido participar", informa en un comunicado.
Asegura que cientos de afiliados al corriente de pago no han podido ejercer su derecho al voto en "una clara maniobra por secuestrar la democracia de este congreso". La semana pasada ya advertía de una serie de irregularidades ya denunciadas, pero insiste en que "se unen otras detectadas el sábado". Las califica de "preocupantes".
Como ejemplo cita "la existencia de un elevado número de candidatos a compromisarios que han visto sus nombres en las listas de Virginia Pérez sin haber rellenado ni firmado documento alguno".
"Pucherazo sin paliativos"
Por su parte, fuentes de los populares en Andalucía acusaban a la directiva nacional de propiciar "un pucherazo sin paliativos".
"Génova ha entrado a saco: desde que empezó todo el proceso, no se ha respetado ni una sola norma que equipare las posibilidades de las dos candidaturas", aseguran a EL ESPAÑOL estas mismas fuentes. Insisten en que "las alarmas saltan porque hay un colaborador necesario que sólo pretende atacar la autoridad y el liderazgo de Juanma Moreno: la dirección nacional del partido".
Estas fuentes justifican este ataque desde Madrid porque "cuando uno no está seguro de su liderazgo, cuando se siente amenazado, ataca a quien pueda hacerle sombra".
Descartando, en cualquier caso, que Juanma Moreno tenga pensado dar un paso a la política nacional, desde Sevilla arguyen que la dirección nacional de Génova "está cogida con alfileres y les falta mucho respaldo a nivel nacional".
Censo creciente
Desde el PP andaluz relatan cómo el censo que se anunció al candidato Juan Ávila era, inicialmente, de 1670 inscritos; sin embargo, este sábado al comenzar el congreso han conocido que el censo definitivo era de 2.160 personas.
"Es algo imposible, porque entre el inicio del proceso y el final, lo habitual es que haya una merma". Además, acusan a la candidata Virginia Pérez de "secuestrar" al partido con la ayuda de Génova.
"Han bloqueado todas las cuentas para evitar que los militantes se pusieran al día en las cuotas: ni en ventanilla ni por transferencia". Es imposible, según relatan, que haya aumentado el censo final en 500 personas.
"El lunes vamos a estar presentando demandas por doquier, esperamos una oleada", indican. Hasta el momento dos militantes presentaron denuncias para poder ejercer su derecho al voto a pesar de no poder ponerse al día en las cuotas. Estos dos militantes recibieron la respuesta afirmativa de los juzgados: podrían votar este sábado.
Los dos autos indicaban que "los dos militantes intentaron, sin éxito, ponerse al día". Ahora, decenas de militantes van a exigir tener el mismo derecho.
"Ávila no ha podido tener ni un representante en el comité organizador; no ha tenido acceso a ningún dato", afirman. "Han cerrado la sede durante quince días y han organizado un pucherazo amparado por la dirección nacional", insisten estas fuentes que, añaden que "cualquier reclamación se tumbaba desde Génova con excusas variopintas y poco creíbles".
Ataque a Moreno
Esta operación se interpreta desde Sevilla como un ataque a Juanma Moreno, y no lo entienden: "Es la primera vez que el PP tiene un presidente en Andalucía, deberíamos estar todos apoyándolo".
Este congreso sólo hace abrir aún más las heridas en un PP que lleva más de cuatro años abierto en canal. Hay dos bandos claramente diferenciados y de difícil acercamiento. "El congreso de hace cuatro años fue también muy duro", indican fuentes regionales.
"El problema es que ahora, Virginia Pérez se ha bajado del barco al que representó hace cuatro años para cambiar de lado y representar a aquel al que atacaba. "De repente, Virginia ha cambiado", añaden.
Por su parte, Pérez ha mostrado en un comunicado su satisfacción por el resultado y ha abogado por mirar hacia el congreso del próximo fin de semana "con más fuerza que nunca, más unidos que nunca y por supuesto integrando, como no puede ser de otra manera".
Antes de conocer los resultados, Pérez ya abrió de nuevo la puerta al acuerdo con la otra candidatura, ya que aseguró que no existe una ruptura ni "algo irreconciliable". La presidenta del PP aseguró que "los acuerdos siempre van a estar encima de la mesa, nosotros no hemos dejado de hablar" y ha agregado: "No necesitamos que hable nadie, necesitamos hablar nosotros".