El último barómetro del CIS, publicado este jueves, también incluye las preocupaciones de los españoles. Aunque los principales problemas siguen siendo los habituales (paro y corrupción), en las últimas semanas se ha disparado la preocupación por la inmigración y se ha reducido la preocupación por la independencia de Cataluña. 

Más en concreto, la preocupación por la inmigración se ha triplicado en un mes, al pasar del 3,5 de junio al 11,1 de julio. Aumento que coincide con la llegada de inmigrantes a las playas y con la crisis del Aquarius, que aconteció a principios de junio. Así, el fenómeno migratorio, que estos días vuelve a estar en la picota, llega a las cifras que marcaba en 2011.  

Justo lo contrario ocurre con la cuestión separatista que durante meses ha copado portadas y telediarios. Desde que Pedro Sánchez está en el Gobierno, la preocupación por Cataluña se ha reducido. En concreto, la hipotética independencia de Cataluña preocupa al 6,3% de los ciudadanos, frente al 7,1% de mes precedente. 

El 64,3% de los encuestados se declara preocupado en primer lugar por el paro, lo que supone casi dos puntos más que el mes anterior. Desciende ligeramente (hasta el 38,5%, un punto menos) el número de quienes se declaran preocupados por la corrupción y el fraude. 

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