La Fiscalía Anticorrupción no ha logrado frenar los permisos de salida concedidos por el Juzgado de Vigilancia Penitenciaria a Carlos Fabra. El ex presidente de la Diputación de Castellón y ex presidente del PP provincial ingresó en la cárcel de Aranjuez en diciembre de 2014 para cumplir una pena refundida a tres años de prisión por fraude fiscal y en octubre de 2015 se le concedió su primer permiso de salida. Le siguieron otros dos permisos en febrero y marzo de 2016.

Pese a que la Audiencia Provincial de Madrid ya desestimó el recurso de la Fiscalía contra la primera salida de la cárcel, Anticorrupción impugnó también las dos siguientes. La Sección Quinta de la Audiencia ha rechazado ahora esos dos recursos argumentando que no ha cambiado ninguna circunstancia que aconseje rectificar las razones que tuvo el tribunal para confirmar el primer permiso penitenciario.

Los magistrados consideran que si algo ha cambiado es a favor de Fabra, que disfrutó sin incidencias del primer permiso y volvió a prisión. El tribunal tiene ahora la constancia de que el ex político ha hecho un buen uso de esa primera excarcelación, lo que era una incógnita cuando se le concedió.

Devolución del dinero

En la misma línea que la jueza de vigilancia penitenciaria María del Prado Torrecilla, la Audiencia ha dado relevancia al hecho de que Carlos Fabra ha pagado la parte principal de la responsabilidad civil y una parte de los intereses, en total unos 800.000 euros. Además, la ejecución de la sentencia condenatoria sigue abierta y tiene embargados varios bienes. De acuerdo con los hechos probados de la sentencia condenatoria, el ex presidente de la Diputación de Castellón defraudó a Hacienda 693.000 euros entre 1999 y 2003.

La Sala ha observado que, en el caso de Fabra, la Fiscalía Anticorrupción ha sustituido a la Fiscalía de Madrid, que es la que normalmente se encarga del control de las ejecuciones de las penas. La presencia de Anticorrupción no ha impresionado a la Sección Quinta, que no ha visto ningún motivo para corregir su criterio.

Régimen abierto

Carlos Fabra se encuentra actualmente en tercer grado penitenciario, una forma de cumplimiento de la pena en régimen abierto que le fue concedida por Torrecilla el pasado abril pese al criterio en contra de la prisión y del fiscal. La jueza de vigilancia penitenciaria tuvo en cuenta que se trata de la primera condena, que es improbable que reincida, que ha cumplido la mitad de la pena, ha satisfecho buena parte de la responsabilidad civil y tiene 70 años de edad.

Anticorrupción también ha presentado un recurso contra la progresión de grado, que debe ser resuelto por la Audiencia de Castellón. 

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