La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Toledo ha condenado a N.G.E., la mujer acusada de acuchillar hasta la muerte a su exmarido en Seseña Viejo en 2020 a un total de 14 años de prisión.

Así lo refleja la sentencia dictada por el tribunal, que ha tenido en cuenta que el Ministerio Fiscal rebajara de 23 a 14 años su petición de pena para la procesada tras admitir los hechos en el juicio.

Tras la confesión, la Fiscalía modificó la calificación jurídica de los hechos, pasando de asesinato con alevosía a homicidio, aplicando además la atenuante de reparación de daño.

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Hechos

La Audiencia de Toledo ha considerado como hechos probados que la víctima, poco antes de las 9.00 horas del 26 de noviembre de 2020 y tras haber pasado la noche con su pareja en su domicilio de Seseña Viejo, mantuvo varias conversaciones telefónicas con la que fuera su esposa y de la que se había divorciado años antes.

Tras una discusión porque la mujer le recriminó que las hijas menores habían sido llevadas al colegio por el chófer en lugar de la propia víctima, la acusada se personó en el interior del chalé. Aprovechando que tenía llave, se personó en el dormitorio y vio que su exmarido estaba con su pareja.

Tras instarle a que se marchara, se abalanzó contra ella y comenzó a tirarle del pelo. Sin embargo, la otra mujer pudo morder su cuello, sacarla del dormitorio y cerrar la puerta con el cerrojo.

Cogió dos cuchillos

Pese a golpear la puerta, no puedo romper el cerrojo, pero la víctima y su pareja acabaron abriendo, pensando que se había marchado. No obstante, la acusada había cogido dos cuchillos de la cocina de hoja "afilada y punzante".

Según la sentencia, "subió hasta el dormitorio portando uno en cada mano e irrumpió en el mismo diciéndole a la víctima que la iba a matar". Esta se abalanzó sobre su exmarido con los cuchillos, alcanzándole en la zona del cuello, seccionando la arteria carótida externa distal y la vena yugular interna ipsilateral, provocando la disección postraumática de la arteria vertebral.

La víctima y su pareja escaparon y se trasladaron en un vehículo particular de un vecino hasta un centro médico, mientras la actual pareja de la víctima trataba sin éxito de evitar "la pérdida masiva" de sangre.

Por su parte, la autora de los hechos salió de la vivienda, dirigiéndose primero al jardín donde procedió a esconder los dos cuchillos utilizados dentro del agua de una fuente, y después cogió su vehículo para seguir el coche.

Fue trasladado primero al Hospital Universitario del Tajo de Aranjuez, si bien la gravedad de las heridas que presentaba provocó su traslado al Hospital Doce de Octubre de Madrid, donde tras ser atendido finalmente falleció a las 16.25 horas del 2 de diciembre de 2020.