La consejera de Desarrollo Sostenible, Mercedes Gómez, ha pedido al Gobierno de España un plan específico para el Parque Nacional de las Tablas de Daimiel, anunciando que serán "muy ambiciosos".

Así lo ha indicado la consejera, confiando en que el acuerdo para salvar Doñana sea "exitoso" y que las medidas que se pongan en marcha allí puedan ser de referencia de lo que debería de existir en el marco de actuaciones de las Tablas. Sin embargo, ha alertado de que el parque nacional ciudadrealeño, su entorno, agricultura y ganadería no tiene "nada que ver" con Doñana.

"Nosotros necesitamos un plan específico para nosotros con medidas claras para nuestra agricultura, nuestra ganadería, nuestra industria agroalimentaria y para la protección fundamental de nuestro Parque Nacional de las Tablas Daimiel", ha expresado.

Sobre su situación, ha recordado que se han recuperado parte de las hectáreas inundadas. "Ahora estamos con algo más de 100 hectáreas inundadas como consecuencia de las medidas que se han ido adoptando de emergencia y también como consecuencia de las lluvias que ha habido", ha afirmado la consejera.

Pese a ello, ha reconocido que "existe todavía la necesidad de terminar de arbitrar los mecanismos necesarios, no solo los establecidos en el plan de uso y gestión del Parque Nacional".

"Castilla-La Mancha está trabajando con el Gobierno en un marco de actuaciones para actuar no solo en el propio parque en sí, sino también en la zona de influencia. Es un trabajo a nivel técnico, para poder presentar ese plan de medidas de choque que tiene que establecerse para la mejora sustancial de las Tablas de Daimiel y del entorno socioeconómico que rodea al parque", ha anunciado.

Medidas

Según Gómez, las medidas tienen que ir encaminadas a varios aspectos. Uno de ellos es garantizar a lo largo de todo el año agua suficiente para el mantenimiento de lo que son las propias Tablas en sí.

Por otro lado, la consejera ha abogado por establecer medidas de protección de la fauna y la flora que hay en las Tablas y medidas relacionadas con los usos que se da al agua en las zonas de influencia del parque.

"Lo que estamos pidiéndole al Gobierno de España es que aparte de las medidas que se pongan en marcha precisamente para atender las necesidades del propio parque, se establezcan también aquellas medidas que nos permitan poder definir claramente qué usos estarían permitidos, qué tipo de agricultura y de ganadería tenemos y necesitamos en esta zona y que tiene que ser compatible con la existencia del parque Nacional", ha expresado.

Por último, ha recordado que a finales del año 2022 se presentó por parte de la Secretaría de Estado de Medio Ambiente, una batería de medidas por 250 millones de euros, una cantidad que al Gobierno de Castilla-La Mancha le parece "insuficiente".