Desde que supimos la noticia de su apresurada partida todo ha sido incertidumbre.Nadie parecía saber nada. Todo era silencio e inquietud.Pasaban los minutos y se convertían en horas, que a su vez pasaban a ser días, y estos semanas. Han sido momentos de desasosiego, desazón, escepticismo, abandono, tensión, informaciones confusas y sospechas.

Sanxenxo. Estoril. República Dominicana. Emiratos... Aparentemente ni el Gobierno ni su familia sabían de él. Y eso lleva a la mente a imaginarse las situaciones más descabelladas; hasta que, tras un aparatoso accidente aéreo, había ido a parar a una isla desierta en medio del Pacífico. Él, el único superviviente. Sin más ropa que la puesta, ataviado con su fiel bastón, sobreviviendo sin escolta, y solo con la compañía de su nuevo amigo Wilson.

¡Qué cosas tiene la cabeza! ¿De dónde habrá salido esa idea?

Pero finalmente toda esa angustia ha llegado a su fin. Este lunes nos dijeron que está sano y salvo en los Emiratos Árabes Unidos. Esta noticia ha llegado como la otra, y como en esos países no se estila mucho el publicar más información de la mínimamente necesaria, la mente vuelve a hacer de las suyas y viaja a través de las dunas hasta Abu Dabi, mientras Peret canta de fondo "no estaba muerto, estaba de parranda".

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Este tiempo de confinamiento da para muchas cosas, hasta para hacer una ilustración en pareja.Mercedes Juanes diseñadora gráfica e ilustradora, y trabaja en una productora de eventos:Brava Producciones. Benjamín Juan es arquitecto desde el año 1987, y socio del estudio toledanoArquitectos San Lorenzo 8. Son padre e hija. Benjamín es un dibujante ocasional en asuntos que no son de su profesión. Mercedes ejerce el dibujo digital a diario. Han unido sus capacidades para hacer una ilustración que va desde el lápiz al píxel, con la esperanza de que se convierta en una costumbre periódica.

Desde hace unas semanas, otro miembro de la familia, Paula Juan, colabora en la redacción del pequeño texto que acompaña la viñeta.