El actual plusmarquista nacional de maratón, Julio Rey de Paz (Toledo 13-1-72), ha tomado hace unos días la decisión de cesar en la actividad como industrial autónomo y dedicarse a la profesión que ha elegido y terminado recientemente de fisioterapeuta.

Julio, casado con la atleta internacional Vanesa Veiga Comesaña, muy querido y admirado en todo el país por su sencillez y humildad, ha decidido cerrar una etapa de su vida y dejar la tienda de deportes, especializada en atletismo. La misma la abrió hace cuatro años en un local donde sus padres tuvieron durante muchos años una carnicería en la calle Canarias, en el barrio de Palomarejos.

Durante los últimos años Julio ha terminado los estudios de Fisioterapia llegando a ellos a través del acceso a la Universidad para mayores  de 25 años. También ha realizado el curso de entrenador nacional de atletismo en Madrid durante los tres cursos correspondientes. Ahora afronta una nueva etapa de su vida como “una alternativa a lo que hacía, pues no me acababa de convencer al estar todo el día encerrado y dejarme poco tiempo libre”. En estos momentos y mientras espera una posible llamada de Madrid para trabajar en un centro, de momento, ha abierto su consulta como fisioterapeuta en su domicilio, en el barrio de Valparaíso.

 Atléticamente sigue entrenando y participando en carreras populares, de cierta elite y como novedad por carreras largas y de montaña. Acude a muchas invitaciones que recibe y coincide con Abel Antón o Martín Fiz, por citar nombres conocidos que fueron gloriosos en su día. Está federado, tiene licencia y corre con el Training Rey Tello, club que fundó recientemente su hermano Fernando y con el que está ligado en su proyecto echándole una mano. Vanesa y Julio viven unos días felices, pues la hija mayor, Silvia, se ha clasificado para correr en el Campeonato Regional de Cross Escolar a disputarse el domingo 18 de febrero en la población de Madriguera(Albacete).