Rozalén regresa a Perú para presentar en dos conciertos las canciones de su último disco, titulado "Cuando el río suena...", al que describió a Efe como su álbum más personal, por contener historias suyas y de sus parientes más cercanos.

La cantautora allbaceteña, que visita por segunda vez Perú, interpretará sus temas este viernes 8 en Arequipa, la mayor ciudad del sur del país, y al día siguiente lo hará en Lima, como cabeza de cartel del vigésimo quinto aniversario del Centro Español del Perú.

Las actuaciones forman parte de su gira "Cuando el río suena...", que incluye cinco países de Latinoamérica, entre ellos Argentina y Colombia, donde se agotaron las entradas, además de México, Perú y Chile.

María de los Ángeles Rozalén (Albacete, 1986) aseguró que no deja de volver a Latinoamérica porque el público de sus países le da "muchas alegrías", y recordó que desde la última vez que estuvo en Perú ha incorporado a su repertorio "La flor de la canela", de la cantautora peruana Chabuca Granda, que ha cantado muchas veces en España desde entonces.

Rozalén explicó que su último disco recoge las historias que le han ocurrido en los dos últimos años, desde que sacó su anterior álbum, titulado "Quién me ha visto..." (2015).

"Me ha pasado un poco de todo y he aprendido de todo. Tiene cosas mías de amor y desamor, pero también historias muy importantes de mi familia, que se me han puesto delante y tenía la obligación de contarlas", comentó.

La artista detalló que son "historias que tienen que ver con la historia política de España, pero contadas con un tono más humano que tal vez puede hacer a la gente ponerse en la piel de otras personas, dicho desde el respeto y con una gran carga emocional".

Entre ellas destacó una canción dedicada a su tío abuelo, desaparecido desde la Guerra Civil española hasta que el año pasado hallaron su nombre en una fosa común, y con la que pretende tocar la memoria histórica.

El secreto de su padre

También tiene otro tema sobre la historia de amor de sus padres, que durante tiempo tuvieron que mantener en secreto su relación, pues su padre fue sacerdote durante diez años hasta que se enamoró de su madre. Cristóbal Rozalén, además, fue mano derecha del socialista José Bono durante su etapa como presidente de Castilla-La Mancha.

Tras sus conciertos en Perú, Rozalén también actuará en Chile y posteriormente regresará a España para presentarse antes de terminar el año en La Línea de la Concepción, en Cádiz, y en su natal Albacete.