2024 será el año en que terminen las obras para canalizar los arroyos de la Degollada y Sangüesa, destinadas a evitar riadas en los centros urbanos de los municipios toledanos de Cobisa y Cebolla. Cuentan con un presupuesto total de 10,3 millones de euros y se espera que sean la solución definitiva a los recurrentes problemas de inundaciones que sufren estos pueblos cuando hay fuertes precipitaciones. Del total, 6,3 millones son para Cobisa y 4 millones para Cebolla.

Según EFE, ha sido el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, quien ha suscrito este martes los convenios de colaboración para la ejecución de las obras con el presidente de la Diputación provincial, Álvaro Gutiérrez, y los alcaldes de Cobisa y Cebolla, Félix Ortega y Silvia Díaz, respectivamente. También ha estado presente el consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo.

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En concreto, son obras de protección y adaptación al riesgo de inundación e integración ambiental en núcleos urbanos que servirán para resolver las inundaciones repetidas que sufren los vecinos de estas localidades debido a las malas canalizaciones. Cabe recordar las graves riadas que sufrió Cebolla en septiembre de 2018 y Cobisa en septiembre de 2021.

Críticas al Gobierno de España

García-Page ha puesto en valor a quienes se implicaron en la limpieza de estos pueblos cuando ocurrieron las desgracias: los dispositivos de emergencia, los ayuntamientos, la Diputación de Toledo y los medios de la comunidad. Sin embargo, ha criticado al Gobierno de España, que "hizo muy poquito y no se portó bien con ambas localidades".

"Las confederaciones hidrográficas son máquinas de poner multas, pero no solucionan los problemas de la gente, como en estos cauces donde se producen las crecidas en los que no están interviniendo y cuando se producen momentos de dureza, miran para otro lado".

Por ello, ha adelantado una "iniciativa potente" para la próxima legislatura para cambiar el papel de las confederaciones. "Consideran los ríos suyos, multan a todo el mundo, pero multan más a los que luego tienen años y años sin resolver expedientes". En este punto, ha elogiado a los dos alcaldes que han trabajado para encontrar una solución.

Agradecen la implicación de la Junta

Por su parte, Silvia Díaz ha asegurado que la obra garantizará que los vecinos puedan dormir tranquilos. De su lado, Félix Ortega ha recordado que estos problemas vienen sufriéndose desde hace tiempo y en 2021 hubo riesgo para la vida.

Ambos alcaldes han agradecido a la Junta y la Diputación su implicación para poner una solución a este problema, una solución que, según ha afirmado también el presidente de la institución provincial, Álvaro Gutiérrez, "va a ser la definitiva a un problema grave que causa daño, dolor y miedo, además de daños materiales en negocios y viviendas".

Y es que la Diputación aporta un total de 1,5 millones a estas obras. "Con el encauzamiento de los arroyos que pasan por el centro urbano se acabará con los problemas que se registraban en vías principales de estos pueblos que tenían una solución difícil".