En pleno debate sobre la conveniencia o no del decreto de ahorro energético, que obliga a los comercios a apagar sus escaparates a las 10 de la noche y a los establecimientos públicos a no poner el aire acondicionado por debajo de los 27 grados bajo sanciones desde 60.000 hasta 100 millones de euros, los guardias civiles que prestan servicio en la Delegación del Gobierno de Castilla-La Mancha, ubicada en la céntrica plaza de Zocodover de Toledo, se asan de calor en verano y se pelan de frío en invierno.

Así lo ha denunciado la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) mediante una nota en la que informan de que el sistema de climatización central del edificio gubernamental "se desactiva desde las 23:00 horas hasta las 07:00 horas" durante todo el año. Una situación que obliga a los agentes que cubren el turno de noche a buscarse las mañas para soportarlo en invierno, algo que se les complica en verano: "El frío lo sobrellevan con mantas y aparatos que llevan desde sus propias casas, pero los 30 grados de temperatura que hay en las instalaciones la mayoría de las noches de verano puede ocasionar golpes de calor o estrés térmico".

Ante la situación, la AUGC ha enviado un escrito y un informe a la Oficina de Riesgos Laborales de la Delegación del Gobierno de Castilla-La Mancha, solicitando que "no se desactive por la noche el aire acondicionado ni la calefacción en invierno" o que, al menos, "se den las instrucciones pertinentes para la instalación de un aparato individual o portátil de aire acondicionado con bomba de calor".

En vías de solución

Fuentes de la Delegación han asegurado a EL ESPAÑOL - EL DIGITAL CLM poco después de hacerse pública esta denuncia que nada más registrarse formalmente la petición de la AUGC se dio orden de instalar un aparato portátil de aire acondicionado en las instalaciones que utilizan los guardias civiles que prestan sus servicios durante el turno de noche. De hecho, esperan que la empresa instaladora ejecute los trabajos en las próximas horas.

La asociación de guardias civiles ha recordado que la legislación vigente sobre seguridad y salud en los lugares de trabajo dicta que "la temperatura de los locales donde se realicen trabajos sedentarios propios de oficinas o similares estará comprendida entre 17 y 27 grados", una horquilla que en la Delegación del Gobierno no se estaba cumpliendo durante la mayor parte de las noches de verano, ya que el edificio acumula calor a lo largo de toda la jornada debido a que su amplia fachada recibe muchas horas la radiación directa del sol

Ya el pasado año, en el mes de junio, la AUGC se reunió con la subdelegación de Gobierno en Toledo para trasladarle esta problemática, aunque por el momento no se había tomado ningún tipo de medida para solventarla. 

Según coinciden tanto la asociación de guardias civiles como la propia Delegación, el apagón de la climatización durante las horas nocturnas está motivado por el ruido que provocan los vetustos aparatos, lo que en fechas anteriores ha generado las quejas de los vecinos. No obstante, la AUGC ha puntualizado recordando que "la Delegación del Gobierno de Castilla-La Mancha tiene la obligación de velar por la seguridad de los trabajadores", lo que "incluye el deber de propiciar una temperatura adecuada conforme a la normativa vigente en materia de riesgos laborales".