Estaba causando gran enfado el supuesto tratamiento dado a una joya histórica y patrimonial de Guadalajara como es el Palacio del Infantado, el monumento más conocido de la ciudad, una noticia que, sin embargo, ha sido contundentemente desmentida por parte del Ayuntamiento a través de un comunicado difundidoo a última hora de este domingo. 

Según publicaba EsRadio en su cuenta de Twitter, los operarios que instalan los ornamentos de Navidad en Guadalajara habían puesto un clavo de grandes dimensiones en la fachada principal del edificio, la más llamativa y la que más lo identifica, y han enrollado un cable de luz con unos tensores. El mensaje estaba ilustrado con varias fotos en las que puede verse el efecto del supuesto desaguisado.

Ante esta situación, la reacción ciudadana no se hizo esperar y fueron varios los que lamentaron lo sucedido. Uno de ellos responsabilizaba a la empresa encargada de estos trabajos y exculpaba al ayuntamiento: "La culpa no es del ayto. Es del idiota del instalador. El ayto debe denunciar al trabajador, a la empresa y abrir expediente para que nunca más trabaje dicha empresa en la ciudad. Parece que quien trabaja para el ayto puede hacer chapuzas impunemente y así tenemos la ciudad".

Rotundo desmentido

Sin embargo, ante esta situación el Ayuntamiento de Guadalajara ha hecho público en sus redes sociales un comunicado en el que se desmienten rotundamente estos hechos y se niega que se haya llevado a cabo ninguna instalación que dañe el Palacio del Infantado. El comunicado municipal dice textualmente lo siguiente:

El Palacio del Infantado es uno de los edificios más emblemáticos y representativos de la ciudad. Una joya arquitectónica que el Ayuntamiento protege y pone en valor.

La empresa que instala la iluminación navideña no ha llevado a cabo ninguna instalación que dañe nuestro Palacio del Infantado. No ha clavado ningún clavo ni ha colocado ningún elemento sobre la fachada que provoque daños. Ha utilizado los clavos existenes para sostener el cable de electricidad del árbol instalado en la plaza de España.

Los muros del Palacio del Infantado tiene numerosos clavos de distintos tamaños, fácilmente visibles para cualquier persona. Son elementos que llevan mucho tiempo en la fachada, fruto de antiguas instalaciones, de obras o procesos de restauración.

El Ayuntamiento de Guadalajara pide una rectificación inmediata de una información no contrastada con la que se acusa a la empresa y a la Institución de atentar contra un edificio muy querido por toda la ciudad.

En las fotografías pueden verse algunos de los clavos repartidos por la fachada".