Ecologistas en Acción (EA) de Cuenca ha presentado una queja y una denuncia ante la Consejería de Desarrollo Sostenible por los trabajos que se han desarrollado durante el mes de julio en la Cañada del Mostajo, en el Parque Natural de la Serranía de Cuenca.

En una nota de prensa, la asociación conservacionista considera que los trabajos que se han realizado constituyen una "infracción grave", y ha recordado que el asunto está en los tribunales y se ha señalado una vista de apelación para el mes de octubre.

Según el grupo ecologista, en la primera mitad del mes de julio se realizaron en la zona actuaciones con maquinaria pesada que la Delegación de Desarrollo Sostenible en Cuenca ha calificado como "restauración", cuando han sido "meramente estéticas" para "tratar de disimular, cuando no de tapar, indicios y ocultar pruebas de la intervención denunciada", ha considerado EA.

Asimismo, ha acusado además a la Delegación de Desarrollo Sostenible y a la empresa que ha realizado los trabajos de haber ejecutado las obras "a escondidas, sin informar a la parte personada (Ecologistas en Acción de Cuenca) y sin un solo documento".

En este sentido, Ecologistas en Acción ha señalado que "no hay proyecto de obra, informe previo de las afecciones, ni la preceptiva autorización de la Consejería de Desarrollo Sostenible", ante la que han presentado una queja y una denuncia.

Además, ha avanzado que el procedimiento penal abierto en enero de 2021 contra la empresa maderera Contradi y la Fábrica de Maderas del Ayuntamiento de Cuenca por las presuntas talas ilegales en la Cañada del Mostajo, y cuyo archivo provisional fue decretado por el juzgado número 2 de Cuenca el pasado mes de marzo, continuará el 5 de octubre con la vista de apelación ante la Audiencia Provincial.

Al respecto, el grupo ecologista ha apuntado que la Fiscalía se ha adherido parcialmente a este recurso de Ecologistas en Acción, lo que les da "esperanzas".

Por otra parte, el miembro de Ecologistas en Acción de Cuenca Carlos Villeta se ha mostrado muy crítico con la actitud del delegado provincial de Desarrollo Sostenible, Rodrigo Molina, al que ha acusado de "ningunear" a los agentes medioambientales que denunciaron las talas y de "ponerse de parte de los investigados".