Un frente asociado a la borrasca atlántica Gerrit, centrada estos días en las islas británicas, va a alcanzar la península dejando lluvias de forma débil en las regiones del norte y prolongando la situación de frío en Castilla-La Mancha, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).

Desde el comienzo de semana, la región está liderando la clasificación de los lugares más frío de toda España. La localidad de Mira, en la provincia de Cuenca, ha registrado por cuarto día consecutivo la temperatura más baja de todo el país con los 9,5 grados bajo cero registrados a las 5:50 horas. No obstante, se trata de un registro medio grado más cálido que el del día anterior: 10,2 grados bajo cero a las 7:50 horas.

Mira no es el único lugar donde el frío está siendo protagonista estos días. Salvacañete, también en la provincia de Cuenca o Molina de Aragón y Sigüenza en Guadalajara, han rebasado cada día los -8 grados centígrados.

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En el conjunto de la región, al frío se le está uniendo estos días la proliferación de bancos de niebla que impiden la visibilidad más allá de 200 metros en muchos casos.

La llegada del frente asociado a Gerrit comenzará a elevar las temperaturas en Galicia, Asturias y muchas partes de Castilla y León. Estos lugares pueden sufrir un incremento térmico de hasta diez grados que no se notará en Castilla-La Mancha.

En cuanto a la previsión de este viernes, se prevén heladas nocturnas menos intensas que en días anteriores en puntos del centro y el este peninsular.

De cara al sábado, el tiempo estable volverá a ser la tónica general, según destaca la Aemet. Las temperaturas apenas sufrirán grandes cambios, con oscilaciones de entre 18ºC y 20ºC en el Mediterráneo, mientras que las heladas nocturnas continuarán en el entorno de los Pirineos, centro e interior oriental peninsular.

El portavoz de la Aemet, Rubén del Campo ha detallado que en ciudades como Albacete, Cuenca o Lleida bajarán hasta -2ºC, mientras que a mediodía, a orillas del Mediterráneo se rondarán los 20ºC en ciudades como Málaga.

Para sábado 30 de diciembre, continúa el tiempo estable, con nubes bajas, bancos de niebla de madrugada y por la mañana también en zonas del oeste y centro de la Península aunque la tendencia general es que los cielos vayan quedando despejados y brille el sol, a excepción de Galicia, donde un frente rozará el oeste de esta comunidad y dejará algunas lluvias.

En general, el sábado las temperaturas no experimentarán grandes cambios y seguirán las heladas nocturnas en el entorno de los Pirineos, centro e interior peninsular, con valores de entre 18 a 20ºC a orillas del Mediterráneo.

Borrasca de fin de año

El amanecer del domingo, día de Nochevieja, será frío y con heladas en el interior peninsular. "Ávila o Teruel despertarán con -3 ºC", advierte la previsión de Meteored. No obstante, "las temperaturas irán subiendo por el aire cálido que impulsará la borrasca que ascenderá desde latitudes subtropicales".  

"Con el paso de las horas la nubosidad irá en aumento por el oeste debido al acercamiento de dicha borrasca y podría llover en Galicia, en el oeste de Asturias y en el noroeste de Castilla y León, con una cota de nieve alta. En el resto de España el tiempo será más estable aunque podría aumentar la nubosidad, con lluvias dispersas y ambiente no muy frío debido a las nubes y a la entrada de aire subtropical", prosigue la información del portal meteorológico.

"Por ahora, parece que durante las campanadas habrá precipitaciones en la vertiente cantábrica, en el norte de Castilla y León y en Galicia, donde las rachas de viento serán intensas en zonas de costa. Las lluvias podrían llegar a buena parte del país durante el Día de Año Nuevo, quedando quizá al margen las zonas del sur-sureste peninsular y Canarias", terminan.