El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha avisado de que va a trabajar "muy duro" y además de la mano de "muchos presidentes autonómicos" para unir fuerzas de cara a exigir la "redefinición" del escenario de financiación autonómica.

Desde un acto inaugural en la localidad de Torija, García-Page ha abundado en que la intención es "un modelo de financiación de servicios públicos que no haga a los españoles irse a grandes ciudades" para disfrutar de ellos.

"Hay que financiar los servicios donde la gente vive y donde queremos que siga viviendo. De lo contrario, tendríamos un problema muy grande de sostenibilidad", ha advertido.

Ahora, ha señalado, si se quiere financiar "bien" servicios como la sanidad o la educación, el debate debe de alejarse de "ver qué comunidad le quita más a la otra", ya que eso sería un debate "confuso".

Por tanto, "no se trata de que Castilla-La Mancha tenga más financiación por que la pierda Cataluña o Madrid". "Si queremos avanzar en igualdad, tenemos que hacer que todo cueste lo mismo en todos los sitios".

Para García-Page, "no existe la sostenibilidad ambiental, ni social, si no existe la económica". "Tenemos que trabajar entre todos por hacer un mundo mejor en conjunto. Esto conlleva unas reglas del juego que tienden a la cohesión social", ha zanjado.

Postura compartida por el presidente de Aragón

La postura de Page también ha sido compartida este martes por el presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán (PSOE), cuya intención es promover un nuevo encuentro presencial entre los dirigentes de Castilla-La Mancha, Castilla-León, Galicia o Asturias el próximo mes de octubre para fijar su postura en cuanto al modelo de financiación, que "no es el de regiones como Andalucía y Valencia".

Lambán ha señalado que no comparte el criterio de financiación autonómica que defienden los presidentes de Andalucía, Juanma Moreno (PP), y de Valencia, Ximo Puig (PSOE), y ha recordado el bloque que conformó en 2018 con Castilla-La Mancha y Castilla y León, Galicia y Asturias, "apostando por combatir la despoblación, la España rural necesitada de oportunidades y la de la baja densidad de población".

Calviño pide que no haya enfrentamiento

La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, ha apelado a las comunidades autónomas a abordar la negociación sobre la reforma del modelo de financiación autonómica desde una "actitud constructiva" y no desde el enfrentamiento.

Así se ha pronunciado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros tras la reunión que han mantenido este martes el presidente de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, y el jefe del Ejecutivo andaluz, Juanma Moreno, para perfilar un frente común en la reclamación del nuevo modelo de financiación autonómica.

Ambos dirigentes han coincidido en pedir al Ejecutivo central un fondo compensatorio para las comunidades infrafinanciadas mientras se reforma el modelo de financiación autonómica. Sobre este asunto, Calviño ha evitado opinar aunque ha asegurado que en todas las CCAA que ha visitado "hay una sensación de infrafinanciación".

"Eso quiere decir que el punto de partida no parece que sea muy favorable a que se logre el necesario acuerdo que va a tener que tener un carácter transversal y por eso digo que es muy importante que este tipo de negociaciones se aborden con una actitud constructiva para entender cuales son las legítimas visiones de las distintas CCAA y del Estado", ha añadido Calviño.

Además, Calviño ha confirmado que la ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, tiene intención de presentar en torno al mes de noviembre una propuesta de la reforma del modelo de financiación autonómica "que puede servir de punto de partida para ese trabajo de escucha y de empatía por parte de todas las CCAA".

En este contexto, ha recordado que esta propuesta de la reforma del modelo de financiación autonómica se tendrá que plasmar posteriormente en una ley orgánica que, según ha señalado, exigirá el acuerdo de los dos grandes partidos políticos: "Va a hacer falta una aproximación amplia por parte de todos los territorios y de los partidos políticos".