La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha solicitado a la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha que las embarazadas, mujeres en periodo de postparto y lactancia sean retiradas del servicio activo para proteger su seguridad y salud.

En un comunicado de prensa hecho público este jueves, el sindicato ha recordado que ante el escenario actual, y dado que la ley de prevención las considera especialmente sensibles y nadie puede asegurar que no sea posible un contagio en el ámbito laboral, debería adoptarse esta decisión.

CSIF ha apuntado que la no exposición de trabajadoras sanitarias y no sanitarias, en función de sus características como embarazo, postparto y lactancia, debe ser prioritario y ha reclamado que sean consideradas como especialmente sensibles y así lo deben instruir los servicios de prevención de todos los centros de trabajo de la región.

Además, ha afirmado que su retirada del servicio activo debe de ir acompañada de la contratación de más personal sanitario y no sanitario para evitar la sobrecarga de trabajo que se producirá.