Es muy significativa la actitud crítica del presidente de la Confederación Empresarial de Castilla-La Mancha, Ángel Nicolás, con el pacto del PSOE con Podemos que ha permitido la entrada del partido de Pablo Iglesias en el Gobierno socialista de Emiliano García-Page. La voz de Nicolás representa a muchos empresarios castellano-manchegos y es muy reveladora de lo que piensa buena parte de la sociedad en torno al Ejecutivo bipartito de Castilla-La Mancha. El presidente de la patronal ha dejado claro que hubiera preferido un acuerdo de gobernabilidad del PSOE con el PP, entre otras razones porque Podemos es un partido antisistema que provoca rechazo y sensación de inestabilidad entre los empresarios de Castilla-La Mancha, y eso por no hablar de su actitud ambigua en la crisis catalana que a tanta gente ha molestado.

Es muy evidente que la Confederación de Empresarios de Castilla-La Mancha está incómoda con el protagonismo central que tiene Podemos en nuestra comunidad autónoma. Un protagonismo que le permite bloquear a su antojo la política en la región, como hizo en la pasada primavera durante varios meses, o entrar a formar parte del Gobierno autonómico y condicionar las políticas regionales de manera sustancial. Un acuerdo entre socialistas y populares en Castilla-La Mancha habría permitido, a juicio del líder castellano-manchego de los empresarios, una mayor estabilidad política e institucional y una perspectiva de futuro más cómoda para todos.

Así las cosas, el presidente empresarial prevé un horizonte político turbulento para el próximo año y un clima no deseable para el crecimiento económico de la comunidad, algo que el propio Ángel Nicolás ha hecho saber al presidente García-Page. No sabemos si las negras sombras que el presidente de Cecam dibuja en el horizonte político de la región se cumplirán o no, pero no cabe duda de que sus palabras representan el pensamiento de muchas personas en Castilla-La Mancha y son especialmente llamativas en un momento tan especial como este.