Castilla-La Mancha es tradicionalmente una tierra con muchos y variados productos agroalimentarios de calidad que son referencia en toda España. El vino, los quesos, el aceite de oliva virgen extra, el azafrán, el melón manchego, el mazapán toledano, la miel, el ajo morado y otros muchos alimentos de primer nivel son típicos productos de Castilla-La Mancha muy bien valorados dentro y fuera de nuestras fronteras. Cada vez son más y mejores las noticias que nos hablan de un creciente reconocimiento de estos tesoros gastronómicos y de su cada vez mejor introducción y comercialización en los mercados nacionales e internacionales, con resultados económicos que son un gran motor de riqueza y empleo para nuestra comunidad.

La excelencia agroalimentaria de Castilla-La Mancha está más que demostrada y tenemos que ensalzar, en este sentido, el gran trabajo que se viene realizando desde las empresas, cooperativas y denominaciones de origen de la región, siempre en permanente movimiento para conseguir más y mejores objetivos. Su trabajo no sólo contribuye a crear impulso económico y desarrollo para toda Castilla-La Mancha, sino también a hacer región y dar una identidad propia y de calidad a tantos y tan buenos productos. Castilla-La Mancha lleva mucho tiempo ya participando y estando presente en las grandes ferias y eventos comerciales de todo el mundo con productos de alto nivel que son un lujo para todos. Ese es el camino y en él hay que perseverar.