El presidente de Castilla-La Mancha y secretario regional del PSOE, Emiliano García-Page, afronta en las próximas semanas una de las etapas más importantes y decisivas en su carrera política. A lo largo del verano y una vez pase el congreso federal del PSOE previsto para mediados de junio, Page tendrá que lidiar con el propio congreso regional de los socialistas castellano-manchegos y posteriormente con los congresos provinciales, cuyos resultados marcarán un antes y un después para el presidente de la Junta de Comunidades. Además, Emiliano García-Page se enfrenta en estos momentos a un nuevo periodo de negociación y diálogo destinado a consensuar con los grupos parlamentarios de las Cortes autonómicas los Presupuestos de Castilla-La Mancha, actualmente bloqueados por el rechazo de Podemos.

La situación es complicada para Page desde todos los puntos de vista y estas próximas semanas o meses serán claves en su trayectoria. Tras la victoria de Pedro Sánchez en las primarias socialistas, el presidente de Castilla-La Mancha y líder regional del PSOE ha visto cómo aparecían nubarrones inesperados en su horizonte político y la situación se llenaba de incertidumbre, un problema que viene a sumarse a la posición de negociación dura que mantiene ante los Presupuestos de la Junta el secretario regional de Podemos, José García Molina, complicando aún más un escenario que Page jamás hubiera deseado. Ambas cuestiones, Sánchez y la vida interna del PSOE por un lado, y los Presupuestos en vía muerta por otro, han puesto la Presidencia de García-Page bajo el volcán y van a hacer que este verano se convierta en el más decisivo y tal vez importante de su carrera política.

Especialmente delicada se presenta la posibilidad de aprobar los Presupuestos, ya que si García Molina se mantiene cerrado en banda puede obligar a Page a forzar una negociación incómoda y apurada o incluso a mantener bloqueadas las cuentas públicas de la región, llevando así al límite una situación que tendría pocas y difíciles salidas para Page. Estamos convencidos de que el presidente de la Junta y líder socialista podrá superar el escollo de su congreso regional y mantener el poder territorial en el partido aunque sea dentro de un nuevo equilibrio interno de fuerzas, pero si Podemos no cambia de actitud y mantiene su negativa actual el bloqueo político e institucional de la región puede llegar a ser insuperable. Todas las opciones están abiertas en estos momentos.