El ministro de Justicia, Rafael Catalá, es también diputado nacional por Cuenca y ha hecho historia: convertirse en el primer ministro de la democracia reprobado por el Pleno del Congreso. Una hazaña de la oposición, que se aprovecha de la minoría parlamentaria del partido del Gobierno para montar todo tipo de circos mediáticos los martes por la tarde, vísperas del control de los miércoles. Le acusan a Catalá de entorpecer la investigación de casos de corrupción del PP y meten en el mismo saco al fiscal general del Estado y al fiscal Anticorrupción, presuntamente a las órdenes del Ejecutivo de Mariano Rajoy según la tesis de moda. No voy a defender a Catalá, y si es responsable de estas acusaciones que pague las consecuencias, pero no encuentro pruebas de verdad en los medios, ni en la iniciativa parlamentaria ni por ahora en ningún sitio.

Pero, en fin, Catalá queda tocado como miembro del Gobierno y políticamente se tambalea, aunque de momento asegura que no piensa dimitir. Su escaño paracaidista por Cuenca fue un gesto de conexión política con la ministra de Defensa y presidenta del PP de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, que ayer tuvo un detalle de complicidad y cercanía con Catalá en el Congreso que recogen hoy gráficamente varios periódicos. Se llevan bien, pero ya veremos si esta ofensiva continúa cuánto tiempo se mantiene el ministro de Justicia en el cargo. Van a por él.

Desde el lado socialista la iniciativa de esta moción contra Rafael Catalá fue dirigida y presentada por la manchega Isabel Rodríguez, diputada por Ciudad Real y un valor en alza en el PSOE, de manera que se completa el círculo castellano-manchego de la operación parlamentaria. Isabel Rodríguez, contundente, avispada y muy inteligente, puso contra las cuerdas al ministro y esta mañana ha conseguido llevar lo suyo a las portadas de todos los periódicos, protagonizando así su parte de esta historia que ha hecho historia. Si seguimos este rastro ya veremos si al final es todo humo o Catalá tiene que irse, aunque Isabel Rodríguez consiguió que toda la oposición apoyase su propuesta y le diese su cuarto de hora de gloria. O incluso más.

Mis lectores ya sabrán que Isabel es una de mis musas favoritas en la política castellano-manchega y que la tengo mucho aprecio y simpatía, así que a seguir bien y en el candelabro. Lo cual me lleva a preguntarme cuál será su futuro político en el PSOE que va a nacer el próximo domingo y qué papel jugará Isabel Rodríguez si gana Susana Díaz o si gana Pedro Sánchez, que no son incógnitas menores. Yo la supongo susanista, como su mentor José María Barreda, pero todo es incertidumbre en el socialismo de hoy en día. Ayer Sánchez abarrotó del todo en Toledo y dejó a la gente de Emiliano García-Page con la boca abierta y la duda al alza. Todo esto es tremendo.

Pero lo mejor del día lo ha publicado este digital. Una doctora toledana, María Paz García, está triunfando como miss a los 40 años, y eso tiene su explicación. No sólo cuentan que es una excelente profesional de la Medicina en el Hospital Virgen de la Salud de Toledo sino que, además, tiene salero y belleza en las pasarelas y con las cámaras delante. Tiene a todo el mundo fascinado. Felicidades también a la toledana Elena Arroyo, presidenta de Bolo Bolo, entrevistada este miércoles en EL DIGITAL sin pelos en la lengua y con mucha claridad. Así debe ser y tal.