El viernes pasado, un color dominaba entre los redactores y presentadores de Televisión Española. El negro. Y no era casual. Eligieron el luto para denunciar el "bloqueo y el secuestro" de la radio y la televisión públicas por parte del PP. La fórmula no es nueva, no por las protestas, que siempre han existido –sobre todo con gobiernos del PP- sino por la forma de llevarlas a cabo. Lo de vestir de negro los viernes para protestar fue una idea que los trabajadores de Radio Televisión Castilla-La Mancha (ahora CMMedia) pusieron en práctica durante la etapa de Nacho Villa como director general del ente. Y con gran éxito, por cierto.

Esa forma de visibilizar los problemas que denunciaban –manipulación, doble redacción, falta de transparencia, etc.- tuvo gran repercusión sobre todo en las redes sociales y de ahí saltó a los medios de comunicación convencionales, con enorme difusión en algunos casos en la prensa, radio y televisión nacionales. Lo llamaban “Viernes a negro” y ese día de la semana la mayor parte de los trabajadores, sobre todo de redacción, acudían al trabajo vestidos de negro y se concentraban en el hall del edificio o a las puertas. Así estuvieron muchos meses.

Este modo de protestar lo han adoptado ahora los trabajadores de RTVE, que el viernes pasado acudieron a los distintos centros vestidos de negro porque el día anterior, los populares torpedearon el relevo en el consejo de administración de RTVE en la reunión de las mesas conjuntas de Congreso y Senado. La paralización sigue y mientras las cosas no cambien, los profesionales de la casa se han conjurado para vestir cada viernes de negro en señal de protesta. En las redes lo difunden con el hastashg #ViernesNegroRTVE.

"Os invitamos a sumaros un viernes negro más en defensa de la independencia y la regeneración democrática en RTVE", escribían los miembros del consejo de informativos, que preside el periodista Alejandro Caballero. El órgano profesional subrayaba que con el #ViernesNegroRTVE se pretende reclamar el "máximo consenso, que todos los partidos se sumen al acuerdo para renovar la cúpula de RTVE y conseguir una tele, radio y web públicas plurales y profesionales" de las que "todos" puedan sentirse "orgullosos.

Nada nuevo bajo el sol.