La organización agraria Unión de Uniones de Castilla-La Mancha inicia este martes su caravana “Por un futuro: La muerte tiene un precio”, que llegará mañana a Madrid, con la que reclaman medidas que ayuden a paliar los daños en cultivos, provocados tanto por la borrasca Filomena como por la fauna salvaje.



Unión de Uniones comienza la marcha de protesta en la localidad toledana de Sonseca y llegará a las puertas del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación mañana miércoles 14 de julio.



La organización agraria, que ya ha realizado protestas en Toledo en las últimas semanas, ha manifestado que da así un paso al frente "ante la ausencia de respuesta por parte de las administraciones".



No entendemos cómo nos han abandonado a nuestra suerte”, ha señalado Unión de Uniones de Castilla-La Mancha, que añade: “nuestros cultivos, tanto olivos, como viñedos son importantes, no sólo para dinamizar el medio rural sino que representan un alto porcentaje de la economía de la región que están ignorando”.



A la caravana se le unirán otros vehículos en la Plaza Elíptica de Madrid, sobre las 10:30 horas del miércoles y circulará hasta las puertas del Ministerio de Agricultura donde se tiene previsto llegar a las 12:00 horas.



Una vez allí, se llevará a cabo una demostración de lo que los agricultores tienen que hacer con un olivo centenario muerto por los daños de Filomena y se dejarán a las puertas del Ministerio cajas de uvas verdes y cepas muertas, al tiempo que se registrará la tabla reivindicativa.



En el acto intervendrá el coordinador de Unión de Uniones Castilla–La Mancha, Andrés García Vaquero, así como coordinador estatal de Unión de Uniones, Jose Manuel de las Heras, y otros miembros de la ejecutiva y de la sectorial del vino.