El secretario de Estado de Economía y Apoyo a la Empresa, Gonzalo García; la consejera de Economía, Empresas y Empleo de la Junta de Comunidades, Patricia Franco; y los responsables de CCOO, UGT y la Confederación Empresarial de Castilla-La Mancha (Cecam) se reúnen este lunes en Toledo para perfilar cómo ejecutar en la región el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, estrategia española para canalizar los fondos destinados por Europa a reparar los daños provocados por la crisis del COVID-19.

En declaraciones a los medios, el secretario de Estado de Economía y Apoyo a la Empresa, tras felicitar a la consejera castellanomanchega por el trabajo "exitoso" de su departamento a la hora de ejecutar las medidas de apoyo al tejido empresarial, ha defendido que el principal reto de la jornada de este lunes es conocer de primera mano la situación de la economía, del tejido empresarial y de los trabajadores de la comunidad y abordar los principales retos del Gobierno central y regional con la vista puesta en la recuperación económica y en la ejecución de Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.

En este encuentro, en el que han abordado los temas que preocupan a la economía regional, la titular regional ha avanzado que en próximas semanas se van a convocar las mesas del Pacto por la Reactivación Económica y del Empleo tras los resultados obtenidos en el plan de medidas COVID.

Ayudas directas

García se ha referido a las ayudas directas para autónomos y empresas, que son fundamentales para limitar los daños que ha producido la pandemia en el tejido empresarial y para facilitar que todas las empresas y todos los autónomos puedan formar parte de la recuperación. En Castilla-La Mancha han sido 206 millones de euros que están llegando ya a las empresas. Además, más de 32.000 empresas de Castilla-La Mancha han recibido más de 4.400 millones de euros de avales del Instituto de Crédito Oficial (ICO).

Gonzalo García y Patricia Franco tras la reunión.

También ha asegurado que los datos de los últimos meses confirman que la recuperación está siendo muy intensa y muy general, está llegando a todas las familias y a todos los territorios y se está reflejando en el empleo. En particular, sobre  Castilla-La Mancha, ha señalado que "además de ser una de las comunidades menos afectadas por la pandemia, está participando en esa recuperación con fuerza". Aquí hay 26.000 afiliados más a la Seguridad Social que hace un año y se ha alcanzado un nivel de 731.000 trabajadores afiliados, que es el más alto desde 2008.

A su vez, el paro ha venido bajando en la región, hasta llegar en agosto a la mayor reducción de la serie histórica, y esto no solo se ve en los datos de afiliación, sino en otro termómetro de la evolución del mercado del trabajo y de la economía que se ha venido siguiendo en los últimos meses, que es el del número de trabajadores en ERTE.

Así, en Castilla-La Mancha están en ERTE algo más de 5.000 trabajadores, que representan menos del 1 por ciento del total de afiliados a la Seguridad Social de la comunidad autónoma, cuando la media nacional está en el 1,68 por ciento de afiliados.

Recuperación plena

Según García Andrés, estos datos "confirman que estamos en una recuperación plena, y que ahora es preciso afrontar los retos de aprovechar las oportunidades y que la política económica pase de la fase de proteger al tejido productivo, a las familias y a los trabajadores de los efectos de la pandemia a una fase de oportunidad, de impulso al crecimiento y al empleo a medio plazo".

Y ha hecho hincapié en que "es un plan al que estamos convocados todos: la Administración central, pero también las comunidades autónomas y los ayuntamientos, y por supuesto las empresas y los ciudadanos".