El grupo bodeguero castellano-manchego Félix Solís Avantis construirá una bodega en la zona central de Chile, la primera con la que va a contar fuera de España, para la que prevé una inversión de 35 millones de dólares. Las obras de la bodega chilena, que iniciará su actividad en la vendimia de 2019, se iniciarán a finales de este año, una vez se terminen de tramitar los permisos oficiales, según ha informado en un comunicado la compañía vitícola.

Asimismo, ha destacado que su construcción permitirá al grupo contar con una bodega dotada de alta tecnología, desde la recepción de la uva hasta el embotellado. La bodega estará ubicada en el Valle de Cachapoal, en la zona central del país, 100 kilómetros al sur de Santiago de Chile,

Es una región con gran variedad de suelos, y en la que abundan las variedades blancas chardonnay y sauvignon blanc, y las tintas merlot, cabernet sauvignon y carmenere, ha indicado el grupo bodeguero. Las instalaciones tendrán una capacidad de producción de 35 millones de litros y arrancarán su producción en el mes de febrero de 2019, con su primera vendimia.

Ls compañía ha señalado que esta inversión en Chile supone un importante impulso para la compañía en su expansión internacional, al ser un país con gran tradición vitivinícola, que ofrece productos de alta calidad y goza de buen posicionamiento en todos los mercados internacionales.

Acuerdos bilaterales

Este posicionamiento se ha fortalecido tras los acuerdos bilaterales de libre comercio firmados en los últimos años con prácticamente con todos los países del mundo, ha indicado el presidente y consejero delegado de la compañía, Félix Solís Yáñez. Con la implantación de la bodega en Chile, el porfolio (catálogo) de productos para la distribución internacional se verá fortalecido, ha subrayado el bodeguero.

Fundada en 1952, Félix Solís Avantis es una compañía familiar con bodegas propias en las principales Denominaciones de Origen españolas: Rioja, Ribera del Duero, Rueda, Valdepeñas, La Mancha y Toro. Sus productos están presentes en más de 120 países y sus mercados más fuertes son la Unión Europea, Estados Unidos, Rusia, Japón y China.

El grupo cuenta con filiales en Europa (Alemania, Francia, Reino Unido y República Checa); América (dos en Estados Unidos) y Asia (dos en China), así como con oficinas de representación en México y Japón. Su amplia expansión internacional le sitúa entre las diez principales comercializadoras de vino del mundo.