El final de liga en el Grupo XVIII se antoja muy caliente. La restructuración prevista por la RFEF para que la próxima temporada todos los grupos de Tercera estén compuestos por 16 equipos y sobre todo los arrastres que provocaría el descenso de equipos castellano-manchegos de Segunda RFEF, hace que a falta de cinco jornadas para el final de la liga regular, pocas cosas se puedan dar por sentadas.

Por el momento, solo es segura la caída a Preferente de tres de los cuatro equipos que la Federación de Fútbol de Castilla-La Mancha dispuso al comienzo de temporada en las bases de competición. El último en consumar la pérdida de categoría ha sido el Miguelturreño tras caer este fin de semana frente al Guadalajara por 0-3 y quedarse sin opciones matemáticas, algo que ya le ocurrió al Hogar Alcarreño la pasada jornada. Estos dos equipos se unen a La Roda, descalificada el pasado mes de septiembre.

En condiciones normales, solo faltaría por conocer el nombre del cuarto equipo que descendería, pero la casi segura caída de equipos desde Segunda RFEF atisba una quema importante. En el peor de los casos, si el Grupo XVIII no consiguiese sumar un segundo ascenso y finalmente Socuéllamos, Toledo, Marchamalo y Calvo Sotelo acabasen la liga perdiendo la categoría, arrastrarían a cuatro equipos que en condiciones normales estarían salvados al final de liga. Esto quiere decir que solo tienen certeza plena de mantenerse los que queden del décimo puesto hacia arriba y, por contra, hasta 8 equipos corren riesgo de descenso a Preferente. Casi nada.

Cabe recordar que además de los 18 campeones de liga, que tienen una plaza para Segunda RFEF asegurada, hay otras 9 vacantes de ascenso. Para completarlas, de cada grupo saldrá un representante después de jugar un play-off entre segundo, tercero, cuarto y quinto. Estos 18 equipos jugarán entre ellos una eliminatoria a partido único cuyo ganador logrará el pasaporte para el salto de categoría.

Si uno de estos ascendidos es del Grupo XVIII, liberaría una plaza y evitaría un arrastre, por lo que habría un 'descenso extra' menos que equipos castellano-manchegos caídos desde Segunda RFEF.

Un galimatías con muchas variantes y pocas certezas que ponen más picante aun a esta recta final de liga en Tercera División.