El entrenador del Albacete, Rubén De la Barrera, ha advertido de la "dificultad" que conllevará jugar en el césped artificial del campo del UE Cornellà, en el partido que se disputa este domingo correspondiente a la novena jornada del Grupo II de Primera División RFEF.

El equipo albaceteño ha entrenado las últimas dos sesiones de esta semana en esta superficie para amoldarse, De la Barrera, quien ha puesto el acento en que "la diferencia está en las emociones y en el tiempo que tardas en adaptarte; lo importante es ir adaptado y no despertarte en el minuto 70 cuando las circunstancias ya son adversas", ha apostillado. Asimismo, ha dicho que un aspecto del que deben estar pendientes sus jugadores serán de "los botes del balón y las trayectorias, que son distintas", y ha añadido que "el campo del Cornellà mide cien por sesenta metros y, claro, al ser más estrecho se nota una gran diferencia".

También ha indicado que habrá múltiples situaciones en saques de banda, saques de esquina y, en general, el balón parado con más frecuencia que en otro tipo de campos, por lo que ha abogado por "conseguir que nos favorezca y no nos vaya en contra". De su rival, el preparador gallego del Albacete ha destacado su carácter "competitivo", así como que atesora "buenos números" y que fue capaz de empatarle al Barcelona en un amistoso jugado recientemente. "Y no fue precisamente en su campo, sino fuera de él, lo que demuestra que es un conjunto muy competitivo fuera de esas dimensiones y capaz de poner en dificultad a cualquier contrario", ha subrayado De la Barrera.

Con cuatro bajas: Yaimil, Del Pozo, Éric Montes y Manu Fuster, los manchegos se medirán a un Cornellà que llega de perder 1-0 ante el Linense. Entre los integrantes del equipo catalán se encuentra Eloy Gila, uno de los héroes del Alba en el último ascenso.

Por tanto, tras ganar la semana pasada al filial del Sevilla por 0-1, los albaceteños afrontan su segundo partido a domicilio consecutivo y será este próximo domingo en el campo del Cornellà a partir de las 18:30.