El CF Talavera tendrá que esperar a la última jornada del campeonato liguero para confirmar su presencia en la Copa del Rey. Y es que, a pesar de la derrota del Sanse frente al Rayo Majadahonda, el conjunto cerámico no pudo con el Rápido de Bouzas en casa en un duelo que se decidió por la mayor pegada de los gallegos (0-2). 

No en vano, fue el conjunto blanquiazul el que tuvo más presencia en los primeros minutos de partido. Y es que los talaveranos, a pesar de las bajas, salieron dispuestos a marcar diferencias para asegurar su puesto de Copa. De este modo, en un primer balón al área, en el minuto 10, ni Rober ni Christian acertaron con la portería visitante en un remate que acabó taponando la defensa visitante. 

Mediada la primera mitad, tuvo que hace run cambio por lesión un Rápido de Bouzas que iba estirando sus líneas. Así, Deivid dejó su sitio a Pedro García en los gualdinegros, que acabaron encontrando el camino del gol poco antes del descanso. En el minuto 42, un balón largo acabó con una dejada para Kaxe, quien desde la frontal se saco un zapatazo que no pudo desviar Sergio Arenas. 

Insistencia sin gol

En la segunda mitad, salió dispuesto a cambiar su destino en el encuentro un Talavera que intensificó aún su presencia sobre el área gallega. Con todo, hubo un pequeño susto para la parroquia, en un derribo involuntario tras un resbalón de Laerte sobre el gallego Christian que el colegiado no apreció como penalti. 

El propio atacante del bando talaverano fue el encargado de firmar la primera ocasión clara para los locales, pero el cancerbero Brais estuvo muy acertado para desbaratar el lanzamiento. Poco después, fue Jesús Jiménez quien recibió la pelota dentro del área, aunque algo escorado, dando opción al portero de tapar bien su palo para despejar su disparo a córner. 

Estaban bien los talaveranos y poco a poco iban rozando el gol, pero una acción de contragolpe anuló sus posibilidades de remontada. Un balón largo sobre Kaxe lo bajó de forma muy elegante el espigado delantero del Rápido de Bouzas, cediendo inmediatamente sobre la entrada de Diego Diz por la izquierda. El pase de la muerte del atacante fue perfecto y Javi sólo tuvo que empujar al segundo palo, en el 76, el 0-2. 

No se rindió el Talavera a pesar de ello, pero las opciones eran mínimas y sólo se registró alguna ocasión más de mérito de los blanquiazules. En especial, un buen cabezazo de Melchor en una jugada a balón parado que despejó Brais con la yema de los dedos, sin que el colegiado concediera el córner. A pesar de esta derrota por 0-2, el cuadro blanquiazul sigue por delante del Sanse y depende de sí mismo para meterse en la Copa del Rey. Necesita, eso sí, puntuar la última jornada en casa del colista, el Cerceda.